Con el creciente aumento en los precios del alquiler y la congelación de los sueldos, el número de familias que tiene dificultades para acceder a vivienda en España no deja de crecer. Esta situación ha provocado que, ahora, en pleno 2021, sean necesarias 1.003.064 viviendas de alquiler asequible en España, según recoge el informe “Vivienda Asequible en España”, elaborado por Atlas Real Estate Analytics y la tasadora Gesvalt.
Para la elaboración de esta estimación, el informe tomó en cuenta a aquellos hogares que tienen una tasa de esfuerzo superior al 40% de sus ingresos mensuales para hacer frente al alquiler. Sin embargo, también publicaron resultados para un porcentaje del 35%, que es un nivel más acorde a las peticiones de diferentes organizaciones. Bajo este pretexto, el número de viviendas asequibles necesario se elevaría por encima de los 1,5 millones.
“Estos números preocupantes surgen de la polarización entre salarios y precios que se ha ido acentuando desde la crisis económica del año 2008. Si tomamos como referencia el periodo comprendido entre 2014 y 2019, podemos ver como los salarios aumentaron un 5%, es decir, 7 puntos menos que el precio de la vivienda, que ascendió un 12% de media en todo el país”, explica Arantxa Goenaga, socia y abogada de Círculo Legal Barcelona.
La región con mayor necesidad de alquiler asequible es Madrid, con 214.740 en el caso de tomar como referencia una tasa de esfuerzo del 40% y 285.983 si fuera del 35%. Le siguen de cerca Málaga, con entre 136.700 y 211.659, y Barcelona, que necesita entre 128.733 y 190.179 viviendas de alquiler sostenible.
La Vivienda de Protección Oficial (VPO), un bien de interés reducido
Tradicionalmente, en España siempre se ha optado por las viviendas de protección oficial como solución a la falta de vivienda asequible. Con el paso de los años, no obstante, el interés de su promoción se ha reducido con fuerza.
“El número de transacciones de vivienda protegida de nueva obra se situaba en torno a las 10.000 y 12.000 en la primera década de este siglo, pero en desde 2013 están por debajo de las 2.000. En el caso de la segunda mano, el ritmo de compraventa sí que ha aumentado desde 2015, pero sigue lejos de las cifras previas a la crisis”, señala la experta.
De cara al futuro, tanto el Gobierno central como los respectivos Gobiernos Autonómicos apuestan por nuevas fórmulas para aumentar el parque de alquiler sostenible en España. La prioridad de estas estrategias es enfocarse en rentas limitadas por debajo del precio de mercado para evitar que las familias tengan que hacer un excesivo esfuerzo para llegar a final de mes, y no tanto en el alquiler social destinado a población en riesgo alto de exclusión.
“La característica común de las nuevas fórmulas de vivienda asequible en España pasa por promocionar nuevas viviendas de alquiler a través de fórmulas de colaboración público-privada”, sentencia Goenaga.
En este marco aparecen iniciativas como el plan “Vive” de la Comunidad de Madrid, que ha subastado este año tres lotes de suelo equivalentes a 6.000 viviendas, el proyectó del “Àrea Metropolitana de Barcelona”, con proyecciones de 4.500 nuevos alquileres de tipo sostenible, o el ambicioso plan del Ministerio de Transportes, con el que pretenden captar 100.000 viviendas, de las cuales la mitad serían cesiones de compañías inmobiliarias y financieras ya construidas.