La antigüedad de una vivienda es clave a la hora de valorar la adquisición de un inmueble sostenible. Mientras que la vivienda de obra nueva se adecua, por normativa, a unos requisitos en materia energética y de eficiencia, comprar un inmueble de segunda mano y convertirlo en un hogar sostenible obliga a tener que acometer reformas en la vivienda. Así, del 48% de los españoles que busca comprar una vivienda de segunda mano, 9 de cada 10 destinará parte de su inversión a la reforma del inmueble y, de estos, el 82% tendrá en cuenta criterios de sostenibilidad al acometerla, según revela el informe “La sostenibilidad en la demanda de vivienda”, realizado por Fotocasa y Solvia.

En este sentido, los principales aspectos que considerarán a la hora de plantear su rehabilitación serán: sacar el máximo provecho de la luz o el agua para reducir el consumo energético (71,2%), dotar a la vivienda con electrodomésticos eficientes (62%), utilizar fuentes de energía renovables (59,4%) y optar por un sistema de ventilación para evitar la estanqueidad del aire.

Por el contrario, el 51% de los compradores quiere adquirir un inmueble de obra nueva. Del total, al 94% le parece importante que sea sostenible. Así, prima que la vivienda cuente con fuentes de energía renovables (67,6%), que los electrodomésticos sean eficientes (60,2%), que tenga un buen sistema de ventilación (59,7%) y la orientación (56,7%).

El aislamiento de ventanas, una prioridad

La vivienda es un espacio donde pasamos la mayor parte de nuestro tiempo, especialmente en la actualidad con el auge del teletrabajo. Por este motivo, cada vez más personas deciden reformar sus inmuebles cada cierto tiempo con el objetivo de mejorar su calidad de vida y adecuarlos a las necesidades del momento.

En el caso de plantearse la realización de una rehabilitación en su hogar, ya sea en la vivienda actual o futura, los españoles priorizarían la inversión en mejorar el aislamiento de sus ventanas (50,9%). Le seguiría de cerca el cambio y actualización de los muebles y electrodomésticos de la cocina y la mejora del aislamiento térmico de paredes y techos, ambas con un 44%. También valoran el cambio de caldera a una más eficiente (42,8%), la reforma del baño (40,8%) o la apuesta por un aparato de aire acondicionado más eficiente (35,3%), lo que demuestra que, a la hora de acometer una reforma, la búsqueda de la eficiencia energética es tan importante como la mejora de la comodidad del hogar o de la decoración.

“Los ciudadanos cada vez más van adquiriendo conciencia de la importancia de la sostenibilidad en la vivienda. Por ello, a la hora de buscar vivienda, la eficiencia energética se ha convertido en la segunda razón por la que los demandantes optan por comprar en el mercado de obra nueva”, explica María Matos, directora de Estudios y Portavoz de Fotocasa. Y añade: “En la actualidad, los españoles valoran tener una casa energéticamente eficiente para ahorrar en su consumo de energía y reducir así la factura de los suministros”.

“España cuenta con uno de parques edificados más obsoletos energéticamente. De hecho, el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) calcula que 90% de los edificios son anteriores a la aplicación del Código Técnico de la Edificación. Gracias al incremento de la concienciación ciudadana y a los diferentes planes y ayudas que se han puesto en marcha para promover la rehabilitación energética y la construcción sostenible, estamos ante una oportunidad, aprendiendo de lo que están haciendo otros países europeos más avanzados en este sentido”, apunta Víctor González, director de Marca y Comunicación de Solvia.