El parque inmobiliario en España cuenta con más de 40 años de antigüedad. De hecho, diferentes estudios apuntan a que el 40% de las emisiones de CO2 son producidas por edificios. En un contexto de recuperación económica, la llegada de los fondos Next Generation EU tiene como objetivo descarbonizar sector residencial español e impulsar la eficiencia energética.
Por ese motivo, el Gobierno ha decidido destinar 6.820 millones de euros al Programa de Rehabilitación de Vivienda y Regeneración Urbana. Es decir, la segunda cifra más elevada dentro del reparto de los fondos europeos.
Iñaki Unsain, personal shopper y presidente de la Asociación Española de Personal Shopper Inmobiliario (AEPSI) explica que “La Comisión Europea quiere impulsar la rehabilitación energética de los edificios menos eficientes y lograr para el 2030 que todas las viviendas tengan por lo menos una calificación F en el certificado energético”.
¿Cuáles son las ventajas de comprar una vivienda eficiente?
Unsain destaca que “un activo energéticamente eficiente puede aumentar hasta un 20% el valor futuro de la vivienda”, algo que se ha convertido en un incentivo para los compradores de viviendas destinadas a la inversión y que buscan un alto porcentaje de la rentabilidad futura.
Uno de los principales beneficios de este tipo de inmuebles recae en la reducción del consumo de energía. Este factor se verá reflejado notablemente en las facturas de la luz y el gas, debido a una mejor climatización de la vivienda. Unsain además explica que “mejora el confort. Al conservar mejor la temperatura interna, la temperatura es más estable tanto en épocas de calor como de frio”.
Características de una casa sostenible
Para que una vivienda sostenible pueda tener un buen aislamiento se deben utilizar materias primas ecológicas como la piedra, el corcho o el PVC combinadas con el uso de energías limpias. Además, el uso de electrodomésticos eficientes y iluminaciones de bajo consumo pueden reducir hasta un 50% el consumo de la energía.
“La ubicación es también importante, una buena orientación de una vivienda reduce considerablemente sus consumos energéticos aprovechando la luz solar, y a su vez es una de las variables más valoradas por los compradores e inversores”, puntualiza el experto.