Adicae cree que la subida de tipos anunciada por el BCE no debería generar problemas de pago de la cuota para «la inmensa mayoría de las hipotecas», ya que un aumento de «35, 50 o incluso 75 euros en la cuota no debería causar impagos», según ha indicado en un comunicado.
El BCE ha decidido elevar los tipos de interés en 75 puntos básicos, de forma que el tipo de interés para sus operaciones de refinanciación se situará en el 1,25%, mientras que la tasa de depósito alcanzará el 0,75% y la de facilidad de préstamo, el 1,50%.
Adicae considera que esta subida de tipos está «fuertemente condicionada por la banca» y sostiene que habría resultado «más oportuno» un aumento del 0,5%, «teniendo en cuenta la situación actual de los ciudadanos y de la economía de la UE» y ha pedido al BCE una política de tipos de interés que tenga «eficacia real» para bajar el «insorportable» nivel de inflación que «sufren» los consumidores.
La asociación ha avisado a los consumidores sobre «la especulación» en las subidas de las hipotecas por la «inexactitud y arbitrariedad» de los comentarios e hipótesis que se están produciendo en las últimas semanas ante la subida del Euríbor. Al respecto, afirma que esta situación «no se corresponde con la realidad muy diversa de los datos de cada consumidor» y recuerda que cada hipoteca «tiene un plazo, un capital pendiente, una fecha de revisión del tipo y un diferencial específico», por lo que el impacto de los tipos de interés es «diferente en cada caso».
¿Qué hipotecados lo tendrán más difícil?
En cambio, las hipotecas más susceptibles de afrontar algunas dificultades serían aquellas más antiguas, de hace 10, 15 o 20 años, contratadas incluso con tipos negativos en los últimos seis años y que, en principio, «deben tener un muy limitado capital pendiente de amortizar».
No obstante, para estos casos, la asociación afirma que exigirá en España una «especial protección», incluyendo establecer la previsión de moratorias, como ya sucediese en la pandemia, cuando resulte necesario. Para las hipotecas más recientes o con tipos negativos, Adicae señala que conformar una financiación «en la que el impacto de las recientes subidas ya habrán contado los consumidores a la hora de contratar las hipotecas y la responsabilidad de la banca».
Aumento de 1.300 euros al año
Por su parte, Asufin sostiene que las subidas mínimas anuales para las hipotecas que se revisen de forma inminente «ya superan holgadamente» los 1.300 euros de media. Según su previsión, el Euríbor se situará en el 2,2% a final de año, lo que significaría que se encarecerán los préstamos de las familias en 130 euros al mes, y más de 1.500 euros al año.
De seguir esta tendencia, Asufin ve posible que en 2023 ya se alcance un euríbor a 12 meses del 3% lo que se traduciría en un encarecimiento de hipoteca que ya podría superar los 2.000 euros, tomando como referencia un préstamo tipo de 100.000 euros a 25 años.
“La subida de tipos encarecerá entre 1.400 y 3.400 euros anuales las hipotecas variables”
Por su parte, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) estima que si el euríbor cierra septiembre en el 1,9% que ha marcado durante los últimos días, esto supondría «una subida de 2,392 puntos» frente al nivel de septiembre de 2021, cuando todavía estaba en negativo con el -0,492%. Este aumento supondría un incremento de 84 euros al mes en el importe de una hipoteca de 100.000 euros o, lo que sería lo mismo, un incremento de 1.000 euros al año.
OCU recomienda, no obstante, que en una operación a «tan largo plazo» como una hipoteca, con vencimientos a 20 años o más, «es mejor ser prudente y no precipitarse». «No deben tomarse decisiones a corto plazo en función de una situación extraordinaria y probablemente temporal como es la invasión de Ucrania y el descontrol de la inflación que está provocando», insiste.