A pesar de que cada vez estamos más concienciados acerca de la contaminación, los informes publicados por los diferentes organismos internacionales no traen buenas noticias. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el aire contaminado afectó de una forma u otra a 46,8 millones de personas en España. Estamos hablando de la práctica totalidad: el 98,7 % de la población.
Urgen soluciones que nos ayuden a controlar los niveles de contaminación, reviertan y al mismo tiempo nos protejan de los perniciosos efectos del cambio climático, cada vez más evidentes. No en vano, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y el Servicio de Cambio Climático Copernicus de la Unión Europea acaban de emitir un comunicado en el que manifiestan que las temperaturas de julio de 2023 han superado récords históricos.
¿Qué soluciones podemos poner en marcha en los hogares? Encender el aire acondicionado a toda máquina no es precisamente la solución más amable para el medio ambiente y la sostenibilidad. Por eso debemos poner la lupa en otras soluciones, más innovadoras y verdes, como los toldos vegetales. ¿Habías oído hablar de ellos? Te contamos qué son, cómo funcionan y qué ventajas traen.
¿Qué son los toldos vegetales?
Puede que los encuentres denominados como Green Shades, pero seguro que te viene mejor saber que son toldos vegetales. ¿Esto significa que están construidos con fibras vegetales? ¿Que están completamente tejidos con flores y plantas? Bueno, más o menos. Veamos. Green Shades es un sistema que sirve para instalar toldos vegetales, que no son otra cosa sino velas tensadas que funcionan como toldos, pero que se recubren de vegetación.
En nuestro país, la empresa SingularGreen es la que se encarga de la instalación de este tipo de soluciones, que en realidad no son para hogares, sino que están pensadas para ciudades. Tal como cuentan en su página web, en realidad todo empezó en 2017, cuando se puso en marcha un proyecto denominado Urban GreenUp, con ADN europeo, financiado por el programa Horizonte 2020.
Lo que promovían a través de sus intervenciones era la puesta en marcha de soluciones reales y efectivas para:
- Mitigar los efectos del cambio climático
- Mejorar la calidad del aire en las ciudades
- Gestionar de manera más eficiente los recursos hídricos
- Hacer las ciudades más sostenibles
Ya por ese entonces, SingularGreen llevó a cabo distintas intervenciones urbanas en ciudades europeas como Liverpool, Esmirna o la misma Valladolid. Los toldos vegetales fueron los protagonistas y parece que han llegado para quedarse.
¿Cómo están fabricados los toldos vegetales?
En realidad estamos hablando de toldos que son velas tensadas, triangulares, cuyos lados miden cuatro metros. Aquellos que han sido instalados por SingularGreen están manufacturados con vegetal textil y están semillados con especies autóctonas. Lo que se procura es que las especies estén expresamente adaptadas al clima del lugar en el que se encuentran ubicadas, garantizando así la correcta pervivencia.
Para lograr este propósito, eso sí, se usa un sistema llamado LeafSkin® que configuran un sistema de jardinería súper fino. Con toda seguridad, el más fino del mundo. Cabe indicar, por otra parte, que la instalación se lleva a cabo a través de un sistema de cables tensores y placas de acero inoxidable, ancladas a las fachadas de la calle. En caso de emergencia podrían desmontarse fácilmente.
Con todo, lo que se consigue es crear espacios urbanos más bellos y sostenibles, revitalizando incluso zonas en desuso o poco atractivas en las ciudades. Un verdadero acierto.
¿Qué ventajas ofrecen los toldos vegetales?
Los toldos vegetales pueden ofrecer muchísimas ventajas, de partida, en las ciudades que aspiran a ser más sostenibles. Veamos cuáles:
- Crean espacios urbanos con sombras: indispensables para generar refugios climáticos ante las elevadas temperaturas
- Reducen la contaminación ambiental: gracias a las especies vegetales que albergan y absorben NOX y CO2
- Minimizan la contaminación sonora: porque el sustrato absorbe buena parte del ruido que se produce en el ambiente
- Regulan la temperatura y humedad ambiental: favoreciendo la creación de espacios más agradables
- Embellecen los espacios urbanos: los hacen más verdes, aprovechables y, en definitiva, amables