Las terrazas y los jardines nos dan la vida. Y es que son una extensión de nuestra casa al aire libre, con la que tenemos la oportunidad de disfrutar del buen tiempo (cuando lo hace) y de aprovechar los últimos coletazos del verano, aunque ya no estemos de vacaciones. Las pérgolas de madera cerradas son una solución a considerar.
En invierno, las terrazas y jardines también son unos aliados estupendos. Aquellos que teletrabajan pueden salir a descansar en ellas, tomar un café o una infusión en sus minutos de descanso o, sencillamente, dejar que los niños jueguen a su aire, aunque sigamos dentro de casa.
A menudo, las terrazas también pueden resultar de gran utilidad para aquellos que quieren ganar más metros cuadrados útiles. Para ello existen los cerramientos, que con estructuras de PVC o aluminio pueden convertir un espacio al aire libre en una segunda sala de estar la mar de práctica.
Otra manera de seguir disfrutando del jardín o de la terraza, incluso cuando hace mal tiempo, es utilizando pérgolas de madera cerradas. Son estructuras relativamente fáciles de instalar, que dan empaque a cualquier terraza o jardín y que sirven para crear un espacio semicerrado al aire libre. Algo que agradecerás en caso de lluvia, viento o de mal tiempo en general, pero que también te vendrá fenomenal si lo que necesitas es ponerte a reparo del sol.
Pérgolas de madera cerradas: ¿qué son y para qué sirven?
Las pérgolas de madera cerradas funcionan como estructuras semifijas, porque se instalan para un tiempo indefinido, pero en caso de necesidad, podrían retirarse sin obras y con cierta facilidad. Al instalar una pérgola de madera cerrada en el jardín o la terraza estamos creando un espacio anexo a la vivienda bajo cubierto, que al ser de este material aportan comodidad y calidez a cualquier entorno.
Pero las pérgolas de madera cerradas presentan otras muchas ventajas. Veamos cuáles:
- Son resistentes: habitualmente están fabricadas con madera tratada, que resiste muy bien a las temperaturas extremas, a la humedad y a las inclemencias meteorológicas, en general.
- Son muy bonitas: la madera es bonita, la mires por donde la mires. Las pérgolas de madera cerradas cumplen con una innegable función estética, porque transmiten calidez y crean ambientes acogedores.
- Son muy versátiles: se pueden instalar prácticamente en cualquier espacio. No importa que sea la terraza de un ático, la parte trasera del jardín o la parte delantera de la casa. Si cuentas con los permisos necesarios para llevar a cabo la instalación, podrás integrarla en cualquier lugar. Y quedará fenomenal.
¿Cuánto cuestan las pérgolas de madera cerradas?
El precio de las pérgolas de madera cerradas que decidamos instalar dependerá de varios factores clave:
- La calidad de la madera con la que esté fabricada
- La dificultad técnica del espacio en el que vayamos a instalarla
- Las dimensiones de la pérgola de madera
- El precio que estipule cada instalador y/o fabricante
- Las características (adosada, con toldo, con techo fijo, con cerramiento de cristal…)
No obstante, y para que puedas hacerte una ligera idea, el precio de instalar una pérgola de madera cerrada (4 x 3 metros) puede estar entre los 3.000 y los 4.000 euros, pero está claro que según las características y condiciones, estas cantidades podrían variar considerablemente.
¿Son fáciles de instalar las pérgolas de madera cerradas?
Las pérgolas son, por definición, estructuras fáciles y cómodas de instalar. Esto nos hace pensar que podemos llevar a cabo nosotros mismos la instalación, aunque evidentemente hay que contar con unos conocimientos básicos de carpintería. Si no los tenemos, lo mejor siempre será contar con la ayuda de un carpintero o instalador especializado, que pueda verificar la idoneidad de la estructura y llevar a cabo la instalación definitiva.
No hay que perder de vista que, aunque las pérgolas de madera han de ser estructuras sencillas, pueden surgir problemas vinculados a la orografía del terreno en el que van a instalarse, con la climatología de la zona u otras. Por tanto, es muy importante contar siempre con la ayuda y los consejos de un experto.
