¡Ay, nuestros amigos felinos! ¿Qué haríamos sin ellos? Los gatos tienen fama de ariscos y de independientes, pero lo cierto es que los hay de todos los tipos y caracteres. Sí, todos conocemos casos de gatos que parecen perros. El caso es que aquellos humanos que aman los gatos lo hacen por encima de todas las cosas.

Sus gatitos son las estrellas de la casa, pero para tener un animal en casa (sea el que sea), hay que contar con una adaptación mínima. Tranquilo, ¡no vamos a proponerte que hagas reformas! Pero hemos pensado que te gustaría aprender un poco más sobre cómo puedes hacer que tu casa sea un entorno cien por cien gatuno. ¿Vamos a por ello? ¡Miau!

1. Un espacio tranquilo para descansar

Ya te hemos contado que los gatos son independientes y más libres que el viento. Necesitan, de hecho espacio para dar rienda suelta a su mundo gatuno interior. ¿Conoces bien a tu gato? Si vas a adoptarlo ahora, lo primero que te recomendamos es observar, observar y observar.

¿En qué espacio de la casa duerme? ¿Dónde se acurruca para descansar y retozar? Él solo te dirá cuál es su lugar favorito de la casa. Es allí donde tendrás que instalar su camita para dormir. Ese gesto sencillo hará a tu gato más feliz. ¡Ellos también son animales de rutinas y costumbres!

2. Un par de areneros para hacer sus necesidades

¿Cuántos areneros tienes en casa? ¿Uno solo? Pues tendrías que incluir otro. Es una recomendación experta, que te vendrá muy bien a la hora de hacer cambios en la arena. Hay gatos tan sibaritas que incluso pueden llegar a rechazar la arena en la que tienen que hacer sus necesidades.

De este modo, podrás hacer cambios rápidos y efectivos, sin que tengas que encontrarte con alguna sorpresita en cualquier lugar de la casa. Ubica los areneros en dos lugares distintos de la casa y prueba.

3. Comida a su disposición

Los gatos son delicados para muchísimas cosas y, lógicamente, también para la comida. Una buena opción para ellos es la de instalar comederos en distintas habitaciones del hogar. Esto te permitirá comprobar en qué lugar le gusta más comer. Si ves que no toca la comida de un comedero es porque no le apetece. ¡Atento a sus reacciones! 

4. Retira cualquier peligro de su paso

Ojo con los gatitos. Cualquiera que parezca inofensivo puede ser un auténtico saltimbanqui felino que arrase con todo. Esto incluye cables, jarrones, lámparas, marcos y cualquier otro objeto decorativo que quede a su paso. Es importante que observes bien a tu gatito para comprobar cuál es su comportamiento: puede que sea un gato bonachón que no toque nada o puede que resulte todo lo contrario.

Adapta todo lo que puedas y mantén a salvo todos aquellos objetos que son importantes para ti. Por si las moscas. Además, al eliminar este tipo de objetos impedirás que tu mascota se haga daño con cables o cualquier otra cosa que entrañe peligros para ella.

5. Rascadores y mobiliario gatuno

Tu gato necesita jugar, experimentar, desfogarse… Si no quieres que utilice tus cortinas como pasatiempo, tienes que proporcionarle juegos adecuados a sus necesidades. Los rascadores son la estrella, porque ayuda a los felinos a aliviar su instinto. Este será el que reciba todos (o gran parte) de los arañazos y no tu sofá.

Pero además de rascadores, en las tiendas encontrarás infinidad de estructuras para que tu gato disfrute de lo lindo: toboganes, hamacas, pasarelas, etcétera. Con todos ellos tendrás a tu gato entretenido y feliz.