Estar cómodos y calentitos en nuestros hogares es un placer en invierno, pero para alcanzar determinadas temperaturas y dependiendo del combustible, la factura de la temporada de frío puede salirnos muy cara. De ahí que existan multitud de trucos para calentar la casa sin encender la calefacción o para encontrar soluciones innovadoras y eficientes.
Una manera de fácil e ingeniosa de calentar la casa es a través de las denominadas alfombras calefactoras. Muchas de las que puedes encontrar en el mercado son de bajo consumo, de modo que además de calentar tu casa, lo hacen de una manera económica. Veamos cómo funcionan las alfombras calefactoras, a continuación.
Qué es una alfombra calefactora de bajo consumo
Una alfombra calefactora de bajo consumo es un dispositivo diseñado para proporcionar calefacción en espacios específicos de la casa de una manera eficiente y económica. A diferencia de los sistemas de calefacción convencionales que calientan toda la habitación, estas alfombras están diseñadas para focalizar el calor directamente en la zona deseada, minimizando así el desperdicio de energía.
Estas alfombras, además, suelen ser delgadas y flexibles, lo que las convierte en piezas ideales para colocarlas en cualquier espacio. Dependiendo del modelo, también las podrás programar y no tienes de qué preocuparte, porque incluyen sistemas de seguridad integrados para garantizar un uso seguro eficaz.
Cómo funciona una alfombra calefactora de bajo consumo
Una alfombra calefactora de bajo consuma funciona a través de radiación. En lugar de emitir aire, como haría un calefactor, estos sistemas emiten calor directamente a los objetos y a las personas que estén presentes en la estancia. Habitualmente, en el núcleo de la alfombra encontramos una película delgada, que es el núcleo calefactor, que se encarga de conducir el calor.
Se alimenta, lógicamente, con electricidad y ofrece a los usuarios la posibilidad de regular la temperatura. La mayor parte de alfombras están equipadas con termostatos y sensores y son capaces de mantener un nivel de calor constante y de ajustar la potencia de la misma según sea necesario.
Cuánto calienta una alfombra calefactora de bajo consumo
La capacidad de calentamiento de una alfombra calefactora de bajo consumo varía según varios factores, como el tamaño de la alfombra, la potencia del elemento calefactor y la eficiencia del diseño. En general, estas alfombras están diseñadas para proporcionar calor localizado, siendo ideales para calentar áreas específicas de una habitación.
Por ejemplo, una alfombra calefactora colocada debajo de un escritorio puede proporcionar calor directo a los pies y piernas de una persona mientras trabaja, creando una sensación de comodidad sin necesidad de calentar toda la habitación. La capacidad de calentamiento también se ve influenciada por la duración del uso y la configuración de temperatura seleccionada.
Cuánto consume una alfombra calefactora de bajo consumo
Una de las características más destacadas de estas alfombras es su eficiencia energética. Al enfocar el calor directamente en la zona deseada, evitan el desperdicio de energía asociado con la calefacción de espacios completos, puesto que el calor es mucho más volátil e impreciso. El consumo de una alfombra calefactora de bajo consumo dependerá de su potencia, medida en vatios (W), y de la duración de su uso.
En comparación con sistemas de calefacción más tradicionales, como radiadores o calefacción central, las alfombras calefactoras de bajo consumo son más eficientes, de modo que tienen un impacto menor en la factura eléctrica. Además, muchos modelos modernos cuentan con funciones de programación y temporizadores, lo que permite ajustar el tiempo de funcionamiento para optimizar aún más el consumo energético.
¿Qué debes saber si vas a utilizar una alfombra de estas características?
Si tienes previsto adquirir una alfombra calefactora, antes de utilizarla debes tener en cuenta lo siguiente:
Eficiencia del aislamiento
La eficiencia de estas alfombras puede mejorar significativamente si se utilizan en espacios bien aislados. Un buen aislamiento ayudará a retener el calor generado, maximizando así los beneficios de la alfombra calefactora.
Tamaño de la habitación
Es importante seleccionar una alfombra calefactora de tamaño adecuado para la habitación en la que se utilizará. Una alfombra demasiado pequeña puede no ser suficiente, mientras que una demasiado grande puede generar un consumo excesivo de energía.
Seguridad de la alfombra calefactora
Asegurarse de que la alfombra calefactora cumple con las normativas de seguridad es esencial. Muchos modelos cuentan con sensores de temperatura y apagado automático para prevenir el sobrecalentamiento.
Mantenimiento regular de la alfombra
Para prolongar la vida útil de la alfombra y garantizar un funcionamiento eficiente, lo más recomendable es hacerle un mantenimiento regular: limpiarla y vigilar que no se produzcan obstrucciones de ningún tipo.
