En pleno invierno y con la escalada de precios como espada de Damocles es normal que busquemos alternativas para ganar bienestar en casa al mismo tiempo que ahorramos. Es cierto que los precios de casi todas las materias primas están por las nubes, pero la elección de un sistema u otro como calefacción es una decisión personal de cada hogar, que debe adaptarse a las características de la vivienda y, por supuesto, a las necesidades de cada familia.
La estufa de pellets es una alternativa que se ha puesto de moda en los últimos años. Pero, ¿sabes en qué consiste exactamente este sistema? ¿Se trata de una alternativa eficiente para calentar una casa? ¿Es tan caro como el gas? ¿Consume mucho? Vamos a dar respuesta a todas estas preguntas, a continuación.
¿Qué es una estufa de pellets?
Una estufa de pellets es un sistema de calefacción que genera calor por la combustión de pellets de madera o biomasa. Esta se produce dentro de una cámara cerrada y emite un gran poder calorífico, lo que sin duda la hace este tipo de estufas mucho más eficientes que otros sistemas. Otra de sus particularidades, especialmente si se eligen los pellets adecuados, es que se trata de un sistema respetuoso con el medio ambiente. Pero tienen que estar certificados como tales.
Sea como sea, el pellet está compuesto por madera sin tratar en su totalidad y tiene un poder calorífico de 4,8 kWh/kg. Si te fijas en la imagen, verás que son pequeña piezas con una longitud de entre 6 y 10 milímetros. Habitualmente van envasados en sacos, que pueden almacenarse en casa en cantidades más grandes.
¿Cómo funciona?
Las estufas de pellets que podemos encontrar en el mercado son fáciles de usar y muy seguras. Es bueno tenerlo en cuenta en casas con personas mayores y niños. Para encenderla, hay que abrir el receptáculo habilitado para este fin e introducir los pellets en el depósito y activarla. Al encenderse, una resistencia eléctrica calienta los pellets y activa el sistema de chorro de aire que activa y aviva la llama.
A través de los sensores de calor, la estufa detecta que hay fuego y pone en marcha los sistemas de ventilación que sirven para sacar el calor al exterior y aclimatar la estancia. Llega un punto en el que se alcanzará la temperatura deseada en la habitación y la estufa parará la combustión. Esta volverá a encenderse cuando la temperatura baje.
Hoy las mejores estufas de pellets funcionan a través de un sistema totalmente electrónico, que puede activarse in situ o incluso a distancia, con un mando a distancia o desde el propio teléfono móvil, lo que sin duda, refuerza la comodidad del sistema.