Quien tiene un vecino, tiene un tesoro. O un problema, depende de cómo se mire. Un estudio recién publicado por Grupo Mutua Propietarios revela que el 33 % de los españoles tiene problemas con sus vecinos, lo que sin duda suele ser un desencadenante de malestar e inquietud. Cuando no de problemas legales motivados, por ejemplo, por el vecino ruidoso de turno.
La mayor parte de personas tienen problemas con sus vecinos por lo que respecta al trato (58 %) en general, por el exceso de ruido (21 %) o por el descuido de elementos comunitarios (15 %), aunque también es común la falta de colaboración (13 %). Y hay diferencias importantes con respecto a las relaciones que se establecen entre ellos.
Pero, ¿de qué manera podemos solucionar los problemas que tenemos con los vecinos? Aunque no es una tarea fácil, vamos a darte algunas claves para disfrutar de una relación mucho más agradable y pacífica y resolver los problemas que tienes con tus vecinos. ¡No lo des por imposible!
Solucionar problemas de trato con los vecinos
Los conflictos de trato son aquellos que surgen de la interacción directa entre vecinos. Porque vivir en una ciudad como Madrid o Barcelona poco tiene que ver con irse a vivir a un pueblo, donde los sentimientos de comunidad y fraternidad están mucho más arraigados. En cualquier caso, los problemas pueden variar desde malentendidos menores hasta desavenencias más graves. Lo más importante para resolver este tipo de problemas es mostrarse abierto al diálogo. ¿Cómo?
Comunicación abierta y respetuosa con el vecino
Te recomendamos ser tú quien inicies la conversación con tu vecino de manera calmada y respetuosa. Y es que la mayoría de veces, los conflictos surgen por falta de comunicación. Además, es importante que muestres una escucha activa, permitiendo que tu vecino exprese su punto de vista sin interrupciones. La empatía es clave para entender su perspectiva.
Buscar el entendimiento común con el vecino
Bueno, en primer lugar, si lo que queremos es solucionar el problema con los vecinos es identificar el problema y saber exactamente cómo nos afecta, evitando generalizar o atacar. Y a partir de ahí hay que proponer soluciones: ofrece sugerencias que puedan beneficiar a ambas partes y estén orientadas a resolver el conflicto de manera constructiva. Además, si la conversación directa no resulta, será preciso optar por la mediación con la ayuda de un tercero neutral. Puede ser, por ejemplo, el administrador de la comunidad o un mediador profesional.
Solucionar problemas de ruido con los vecinos
El ruido es una de las quejas más comunes en las comunidades, muy a pesar de que más o menos se sepa hasta qué hora se puede hacer ruido en casa. Ya sea por música alta, fiestas, el ladrido constante de perros o incluso el canto de los pájaros, el ruido puede ser una fuente importante de conflicto. Algunas estrategias para solucionar los problemas de ruido con los vecinos pueden ser:
Dialogar con el vecino cuando hay problemas de ruidos
El diálogo es fundamental en prácticamente todas las facetas de la vida. Lo primero y más importante es expresar la inquietud o preocupación que emite los ruidos. Acércate a tu vecino y explícale cómo te afecta el ruido. Nuestra recomendación es que lo hagas de manera amigable: tal vez puedas sugerirle horarios en los que el ruido sea menos perturbador. También puedes proponerle soluciones, como el uso de alfombras para amortiguar el sonido o establecer horarios en los que el ruido sea aceptable.
Recurrir a las normas comunitarias por los problemas de ruido con los vecinos
Lo primero es conocer las reglas. Comprueba cuál es la regulación del municipio y qué dicen los estatutos de la comunidad sobre los niveles y horarios de ruido. Si el problema persiste y no hay manera de atajarlo, te recomendamos hablar con la comunidad de propietarios y su responsable para tomar entre todos una decisión que os permita solventarlo. Mientras tanto, tal vez tengas que usar tapones para los oídos o ruido blanco para que el ruido no te resulte tan molesto.
Problemas con los vecinos por el descuido de elementos comunitarios
El mal uso o el descuido de los elementos comunitarios, como jardines, áreas de juego o piscinas, puede ser una fuente de tensión entre los vecinos. ¿Qué estrategias podemos usar para resolver este tipo de problemas con los vecinos?
La comunicación como herramienta para solventar problemas con vecinos
Lo primero y más importante: hay que informar a la comunidad. Dirígete a la administración o al presidente para expresar tus preocupaciones y discutir soluciones posibles.
Organización de jornadas de mantenimiento en la comunidad de propietarios
Es muy importante que tengas tus propias iniciativas. Por ejemplo, puedes proponer la organización de jornadas de limpieza o mantenimiento donde todos los vecinos participen en el cuidado de los espacios comunes. También podéis formar grupos encargados de diferentes áreas puede ayudar a distribuir las responsabilidades y fomentar la cooperación.
Implementación de normas y sanciones en los estatutos de la comunidad
Lo siguiente será establecer unas reglas claras. Aquí es importante trabajar con la comunidad para que las normas sobre el uso y mantenimiento de los distintos elementos comunitarios estén en los estatutos, pero que también puedan comunicarse (a través de carteles o sugerencias por los grupos de WhatsApp). Y a todo esto hay que implementar sanciones para quienes no respeten las normas.
Problemas con los vecinos por falta de colaboración
La falta de colaboración en actividades comunitarias, como reuniones, limpieza o proyectos conjuntos, puede crear resentimiento y afectar la armonía de la comunidad de propietarios. Veamos qué estrategias pueden resultarnos útiles para resolver problemas con vecinos por falta de colaboración.
Fomentar la participación de todos los vecinos
Invita a los vecinos personalmente a participar en actividades comunitarias, haciendo hincapié en la importancia de su contribución. Si estás motivado, ,también puedes organizar eventos comunitarios atractivos que fomenten la participación, como picnics u otros encuentros sociales. Podéis aprovechar estos momentos para explicar las normas, como por ejemplo, sobre cómo deben convivir las mascotas para evitar conflictos en las comunidades de propietarios.
Repartir responsabilidades entre todos los vecinos
Otra manera de solucionar este tipo de problemas es creando un calendario de rotación de tareas, con el que puedas implementar un sistema de rotación para las tareas comunitarias. Así todo el mundo tendrá un turno para contribuir. Además, tendrás que definir el rol de cada persona y sus responsabilidades específicas para que sepan cómo colaborar y, ante todo, resultar útiles.