El ministro de Fomento, José Luis Ábalos, ha descartado este jueves que el Gobierno vaya a fijar un precio tope para moderar el precio de las viviendas en alquiler y ha confirmado su intención de elevar de tres a cinco años la duración de los contratos de alquiler.
Ábalos, en declaraciones a RNE recogidas por Europa Press, ha advertido de que existe «una burbuja de precios en el alquiler», en algunas zonas con precios «disparados», y ha insistido en que el Gobierno va a potenciar el alquiler de la vivienda.
De ahí el plan a cuatro años que está diseñando su Departamento y con el que sacará 20.000 viviendas para alquiler social aprovechando los conciertos con administraciones autonómicas y municipales y también las viviendas que están en manos de la Sareb, con la que ya está negociando.
Pero dentro de esa política de hacer «asequible» el alquiler, Ábalos ha descartado topar los precios porque el mercado «termina regulándose en función de las intervenciones», en este caso de los poderes públicos.
El ministro ha reconocido que el problema del alquiler es especialmente grave en Madrid y Barcelona, aunque ha apuntado que las viviendas que sacarán a alquiler social dependerán de la oferta de suelo. En todo caso, ha afirmado que también se pueden poner en el mercado viviendas ya terminadas.
«Tenemos un problema grave en política de vivienda, que estaba abandonada. La vivienda tiene que tener un carácter de derecho básico», ha dicho Ábalos, que ha añadido que dentro de los planes del Gobierno está también el de «dar cierta seguridad» a los inquilinos alargando el contrato del arrendamiento de tres a cinco años.