El Tribunal Supremo (TS) ha fijado que los contribuyentes pueden obtener la exención en el IRPF por la reinversión en una vivienda habitual en fase de construcción del importe procedente de la venta de otra vivienda. Será dentro del periodo de dos años que marca la ley del IRPF. Aunque la vivienda se habite con posterioridad por estar aún en fase de construcción.
En concreto, la Sala III de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo ha fijado en una sentencia que el plazo de que dispone el obligado tributario para reinvertir el importe obtenido con ocasión de la transmisión de su vivienda habitual para tener la exención en el IRPF, cuando la reinversión se materializa en una vivienda que se halla en fase de construcción, es el de dos años.
Estos dos ejercicios de plazo son contados desde la transmisión de su vivienda. Bastando con que en dicho plazo reinvierta el importe correspondiente, sin necesidad de que adquiera el dominio de la nueva vivienda. O de que la construcción de esta haya ya concluido.
Desestimado el recurso de casación que condicionaba el cumplimiento del plazo de dos años
El alto tribunal desestima así un recurso de casación del abogado del Estado, que consideraba que debía condicionarse el cumplimiento del plazo de dos años a la entrega material de la vivienda construida. «Una exigencia que ni se encuentra en la ley ni cabe deducirla de su tenor, pues esta habla de reinversión exclusivamente», señala la Sala.
La sentencia confirma el fallo dictado con fecha 21 de mayo de 2019 por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, que estimó el recurso de una contribuyente contra la negativa de Hacienda a aceptar que reunía el requisito del plazo de reinversión de dos años para lograr la exención. La mujer enajenó su vivienda habitual el 8 de febrero de 2007, compró una nueva en construcción el 14 de febrero de 2007. Y esta le fue entregada mediante escritura notarial de 9 de abril de 2010.
La resolución recoge que la obligada tributaria reinvirtió el importe obtenido en la compra de una vivienda habitual en menos de dos años desde la enajenación de la anterior. Pero que la nueva vivienda – que estaba en construcción cuando es adquirida – no le fue entregada hasta algo más de tres años después desde aquella transmisión.
Así, el Supremo explica, de acuerdo a la interpretación que realiza de la Ley y del Reglamento del IRPF, que era procedente la exención al haberse realizado la reinversión en el plazo de 2 años. Aunque la construcción no estuviese concluida.
La exención por reinversión en la adquisición de vivienda habitual, en el caso concreto, fue por la suma de 86.066,92 euros. Aplicada por la contribuyente en la autoliquidación del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas correspondiente al ejercicio 2007. Había sido negada por la Administración Tributaria.
Textualmente, el criterio que fija el Supremo en esta materia alude a la interpretación de los artículos 38.1 de la Ley 35/2006, de 28 de noviembre, del IRPF y de modificación parcial de las leyes de los Impuestos sobre Sociedades, sobre la Renta de no Residentes y sobre el Patrimonio, y 41 del Reglamento del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, aprobado por el Real Decreto 439/2007, de 30 de marzo».
La interpretación que hace señala que cuando la reinversión se materializa en una vivienda que se halla en fase de construcción, es la de que el plazo de dos años establecido reglamentariamente para reinvertir es aquel del que dispone el contribuyente. Y debe contarse desde la transmisión de su vivienda, bastando a tal efecto -para dar cumplido el requisito- con que en dicho plazo (dentro de los dos años siguientes a la venta) reinvierta el importe correspondiente. Sin necesidad de que adquiera el dominio de la nueva vivienda, mediante su entrega material. O de que la construcción de ésta haya ya concluido.