Es muy probable que en las últimas semanas hayas visto un montón de anuncios recomendándote instalar paneles solares en casa. Los altos precios de la energía han hecho que muchos hogares y empresas se planteen la posibilidad de optar por energías alternativas. Al contexto de precios actual hay que añadir la preocupación creciente de los usuarios por la sostenibilidad. Los paneles solares son una de las soluciones que mejor pueden integrarse en una vivienda, pero… ¿merece la pena instalarlos? ¿Son de verdad rentables? ¿Cuándo y cómo amortizaré la inversión? ¿Podría ganar dinero con el excedente?
A continuación, respondemos a todas estas preguntas y te contamos los paneles solares son de verdad una solución eficiente para reducir la contaminación y el gasto energético en el hogar.
¿Qué son y cómo funcionan los paneles solares?
El sol es una de nuestras más grandes riquezas, no solo como habitantes del planeta, sino como ciudadanos de nuestro país. España es un lugar privilegiado, porque contamos con unas 2.500 horas anuales de sol, aunque en algunas regiones incluso se pueden superar las 3.000. Si lo comparamos con otros países, veremos que en Alemania o Reino Unido la media está en 1.600 horas.
El sol puede proporcionarnos energía de sobra para conseguir electricidad. Para obtenerla, eso sí, tenemos que instalar lo que se denominan paneles solares, que son los que nos ayudan a conseguir la denominada energía fotovoltaica. Las tecnologías actuales, además, son capaces de seguir obteniendo energía aunque el cielo esté nublado y puede que en el futuro incluso puedan generar energía de noche.
Los paneles solares son unas planchas muy discretas, cuyo tamaño depende del fabricante. Sin embargo, podemos decir que el grosor aproximado es de cuatro centímetros. Estos paneles, que se instalan en los tejados, constan de unas células recubiertas por plástico EVA (compuesto por etileno y acetato de vinilo) capaz de soportar temperaturas y condiciones meteorológicas extremas.
En cualquier caso, tras la captura de energía lumínica, estos paneles se encargan de transformar la corriente de continua a alterna. De este modo, la energía está lista para que podamos usarla en nuestros hogares.
¿Cuándo vale la pena poner paneles solares?
Son muchos los fabricantes que hoy proponen la instalación de paneles solares con ofertas atractivas. Lo que debemos tener en cuenta como usuarios es que los paneles solares tienen un coste elevado en cuanto a inversión. Los mismos instaladores serán los encargados de realizar el cálculo de las necesidades energéticas de tu hogar.
Cómo se calcula cuantos paneles solares necesito
La empresa instaladora se encargará de calcular cuantos paneles solares necesita tu hogar, pero ya te avanzamos que los datos que te pedirán serán los siguientes:
- El consumo energético de la vivienda
- La superficie disponible para instalar los paneles
- El tipo de perfil de consumo
No te preocupes, porque todos estos cálculos los harán los técnicos instaladores, eligiendo las opciones y capacidades que se ajusten a tus necesidades reales.
¿Cuánto genera una placa solar al día?
Las placas solares suelen aprovecharse más durante las horas de más sol y, por supuesto, los días soleados. Está claro que cuanto más grande sea el panel, más células solares tendrá y, por tanto, más energía podrá generar. Un panel estándar de unas 50 células puede llegar a generar unos 4 kWh al día y 124 kWh al mes. Si tienes un consumo medio o bajo, puede que los paneles solares puedan ayudarte a cubrir de manera holgada tus necesidades. Además, si tienes excedentes, la energía podrá inyectarse nuevamente en el mercado eléctrico y podrás recibir una compensación en tus facturas por ello.
Concluyendo, ¿merece la pena instalar paneles solares?
La respuesta es sí, pero es importante que tengas en cuenta que los paneles solares exigen una inversión más o menos costosa, aunque no inasequible, como años atrás. Como ejemplo, te indicaremos que una instalación con una potencia de 2,73 kWp, con seis paneles solares sobre una superficie de 12 metros cuadrados, puede tener un coste aproximado de 6.000 euros (aunque dependerá del proveedor).
En este caso, el porcentaje de autoconsumo puede alcanzar el 50 %. El ahorro anual para una familia media sería de unos 570 euros anuales y el tiempo de amortización alcanzaría los 10 años. Hay que indicar, por otra parte, que la mayor parte de empresas ya ofrecen a sus clientes la posibilidad de financiar la instalación para pagarla en cómodas cuotas y sin apenas esfuerzo.
