Si eres de los que revisan con lupa la factura de la luz, seguramente te hayas dado cuenta de que en los últimos dos recibos ha aparecido un concepto un tanto extraño, que encima no hace más que sumar a la ya de por sí abultada factura habitual. Es la letra pequeña del tope del gas anunciado por el Gobierno. La excepción ibérica, ese mecanismo por el que se topa el precio del gas que las eléctricas usan para generar electricidad, ha abaratado considerablemente la factura. Sin embargo, que aparezcan esos conceptos en el recibo mensual ha descolocado – y mucho – a los usuarios, que ahora parece que pagan más por consumir lo mismo. O incluso menos.

El coste al que nos referimos aparece con este concepto en la factura: Coste tope del gas RDL 10/2022. Esto hace referencia al Real Decreto-ley 10/2022, de 13 de mayo, por el que se establece con carácter temporal un mecanismo de ajuste de costes de producción para la reducción del precio de la electricidad en el mercado mayorista. Este sistema aprobado por el Ejecutivo de Pedro Sánchez pone un tope al precio del gas de 40€/MWh.

El problema es que en esta misma legislación se establece una manera de compensar a las empresas de gas. De este modo, terminamos pagando el elevado precio del gas, que actualmente está por encima de los 200€/MWh. La diferencia entre los 40€/MWh y los 200€/MWh tiene que abonarse a las compañías y la pagan los consumidores. Por eso la habrás visto añadida a tu factura: e incluso a veces puede superar el precio de la energía. Otra gran paradoja.

Los clientes del PVPC no verán este coste en sus facturas, porque está combinado con el coste de la energía. La sorpresa seguramente se la lleven los clientes del mercado libre, siempre que hayan actualizado su tarifa a partir del 26 de abril, que se encontrarán con la compensación especificada aparte. Esto ha provocado aumentos sin precedentes en las facturas, de modo que piensan que están pagando la luz incluso más cara que antes de que se aplicara el tope del gas.

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¿Cuándo entró en vigor el tope del gas?

El tope del precio del gas entró en vigor el pasado 15 de junio, pero muchos clientes no lo han visto en sus facturas hasta julio. Y la sorpresa ha sido mayúscula. No obstante, los expertos aseguran que sin el tope del gas, el precio de la factura habría sido aún más elevado. Esto no ha impedido que agosto nos haya regalado la factura más cara de la historia. En cualquier caso, nuestro análisis diario sobre el precio de la luz nos revela que sin el mecanismo de la excepción ibérica, de media habríamos pagado entre 50-60€/MWh. Gracias a esta medida, también se evita que el impacto que tiene el gas contagie el resto de energías.

¿Quién paga la compensación del gas?

Como te decíamos, son los consumidores los que tienen que asumir este coste. Se trata, eso sí, de una compensación variable. El precio del gas varía cada día y no todos los días se necesita el mismo gas para producir energía eléctrica. Digamos que en cuanto es posible echar mano de otras energías, como la solar o la hidráulica, se puede prescindir en mayor medida del gas. Cuando eso no ocurre, la necesidad de consumir gas se amplifica y las plantas productoras siguen pagándolo a esos elevadísimos precios. Son los consumidores, a través de su factura, los que están obligados a pagar esa compensación.

¿Qué son los cargos normativos en la factura de luz?

Otra cuestión que también está generando muchas dudas tiene que ver con los denominados ‘cargos normativos’. Algunos clientes han visto que en sus facturas ha aparecido de repente un concepto nuevo: el de los cargos normativos. Las compañías eléctricas que lo aplican (Iberdrola es una de ellas) incluye un coste (la famosa compensación) de 30 euros cada vez que uno de sus clientes finaliza un contrato anual y comienza uno nuevo. Es el coste que, como compensación, tienen que pagar todos los usuarios de manera equitativa.

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¿Si no tengo gas natural en casa, por qué tengo que pagar el tope del gas?

Es una pregunta que se hacen muchas personas, sorprendidas al ver este concepto en la factura. El precio del gas que pagamos en la factura eléctrica (mejor dicho, la compensación) nada tiene que ver con el gas que podamos tener instalado o no en el hogar para el agua caliente o la cocina. Este es el gas que las centrales utilizan para generar energía eléctrica. Por eso lo pagamos entre todos.

¿Hasta cuándo estará vigente el tope del gas?

Si no se producen más novedades ni ampliaciones, el tope del gas estará vigente hasta el 31 de mayo de 2023. Así pues, habrá que seguir abonando la compensación, como mínimo, hasta esa fecha.