¿Si pudieses marcharte a vivir en un entorno casi paradisíaco, qué lugar elegirías? Nosotros tenemos un favorito y no está tan lejos como imaginas. Hoy nos vamos de viaje a las Baleares, concretamente a Formentera, la isla balear menos poblada, con 69 kilómetros de litoral con playas y acantilados de una belleza incomparable.

Estamos en una isla muy llana, con un clima suave y vegetación de tipo mediterráneo, combinada con zonas dunares, bosques de pino, sabina y matorral. La vivienda que hoy te invitamos a visitar no es una gran mansión con muchos metros cuadrados. Nada más lejos de la realidad.

Se trata de un apartamento pequeño, discreto, pero con unas vistas al mar que te sorprenderán. Y es que nada más asomarte al balcón de esta primera planta, tendrás ocasión de ver el paseo y la bahía de Es Pujols.

Una casa en el mar

El apartamento está ubicado en una primera planta, a pie de calle, pero con vistas directas al mar. Se encuentra en un lugar privilegiado y por dentro es encantadora. De hecho, fue reformada en 2002. Pero, ¿cómo es por dentro? Se trata de una vivienda pequeña: tan solo tiene 39 m2 y una única habitación, así que es perfecto para una pareja que quiera disfrutar de unos días de vacaciones.

El dormitorio es amplio y tiene un armario empotrado, ideal para el almacenamiento. Consta de un baño completo, un salón-comedor con cocina y un balcón que, como ves, ofrece unas vistas estupendas al paseo marítimo. La cocina, el baño, el suelo y la instalación eléctrica son nuevos, con lo que la vivienda está lista para entrar a vivir.

El piso está ubicado en una calle peatonal, sin tráfico y sin bares, justo al lado de los varaderos de pescadores. Si buscas paz y tranquilidad en cualquier época del año, este apartamento debería ser tuyo.