Hace más de un año que pasamos mucho más tiempo en casa de lo habitual. Los meses de confinamiento nos sirvieron para vivir nuestra casa con toda la intensidad, aprovechando todos y cada uno de sus rincones o incluso repensando determinados usos y espacios.
En general, además, nos hemos enfrentado este nuevo período con unos objetivos y unos propósitos bien distintos a los que podíamos tener en el pasado. La salud se ha convertido, ahora más que nunca, en una prioridad. Hoy miércoles 7 de abril celebramos el Día Mundial de la Salud y lo hacemos recomendándote una serie de hábitos saludables para incorporar a tus rutinas en el hogar. ¿Nos ponemos en marcha?
Crea un ambiente ordenado y agradable
Tu casa es tu refugio y mereces que sea lo más agradable posible. Aplica pequeñas rutinas que te ayuden a mantener el orden y que te hagan sentir bien. No hay nada mejor que llegar a casa y encontrarte con una buena bienvenida. Para conseguirlo, no dejes que se te acumule el trabajo: deja las cosas en su sitio y ordena todo aquello que esté fuera de su sitio al momento. De este modo, evitarás que todo se vuelva a desbordar.
Relájate y duerme bien
Tu sueño debe ser reparador y, para ello, tiene que alargarse durante siete u ocho horas. Intenta incorporar a tu vida hábitos saludables para dormir bien. La iluminación tiene un papel fundamental, puesto que debe reducirse a medida que cae la noche. También hay que evitar el uso de pantallas hasta última hora (incluso en la cama) y, si es posible, practicar algunos ejercicios o rutinas de relajación. No hace falta meditar. En realidad bastaría con hacer cualquier cosa que te haga sentir bien y te relaje, como por ejemplo leer o escuchar música suave.
Cuida la higiene y la ventilación
¿A quién no le gusta vivir en una casa que huele bien? Contar con una buena ventilación ha sido siempre muy importante y ahora, en tiempos de pandemia, todavía más. Es preciso ventilar al menos diez minutos diarios, a primera hora de la mañana (y en cualquier otro momento del día que lo consideres) para oxigenar la casa. Además, es importante maximizar las medidas de higiene. Puedes hacerlo con productos naturales o usando productos desinfectantes sin lejía. Si quieres aromatizar tu casa, puedes usar ambientadores naturales, velas o aceites esenciales para que tu hogar quede inundado con tus aromas favoritos.
Un espacio para trabajar
¿Tú también teletrabajas? Si ese es tu caso y prevés que la cosa vaya para largo, quizá sería interesante que adaptes mejor tu espacio de trabajo en el hogar. Para tu salud y productividad, estaría bien que pudieras contar con un estudio o despacho específico, que te permita separar tu vida personal de la profesional. Al mismo tiempo, lo recomendable es que tengas espacio para desempeñar tu labor y organizarte. Cuida que este sea un espacio agradable, a ser posible con abundancia de luz natural, buena decoración y plantas.
Come bien y procura tener actividad física
El sedentarismo se ha instaurado en nuestras vidas, ahora más que nunca. Si a esto le sumamos que durante el confinamiento comimos un poco peor, el resultado puede llegar a ser catastrófico para nuestra salud. En realidad, bastaría con una dieta mediterránea en la que consumas un poco de todo, especialmente fruta y verdura, y evites alimentos procesados y refrescos, entre otros. Aprovecha la llegada del buen tiempo para salir al aire libre, hacer deporte o sencillamente caminar. Si no puedes, haz ejercicio en casa: si algo nos ha traído la pandemia son infinidad de tutoriales para ponernos en forma desde el salón del hogar.