El precio de las energías sigue por las nubes y este invierno promete incrementar la factura de los hogares españoles como nunca. Reducir el consumo puede ser determinante para que nuestras facturas no se disparen, pero está claro que hay que poder mantener una temperatura adecuada en el hogar. 

Lo que hoy queremos contarte es que hay distintas opciones, herramientas y mecanismos para conservar al máximo el calor dentro del hogar. Así, aunque utilicemos la calefacción u otro tipo de sistemas para calentarnos, podemos hacer uso de alternativas que nos permitan dejar de gastar tanto. Fíjate, tienes infinidad de técnicas y opciones. 

La importancia de los textiles

Seguro que en verano te das mucha prisa para quitarlos, pero en invierno son esenciales. Nos referimos a los textiles: alfombras, cortinas, cojines, mantas… Son fantásticos como aislantes, tanto para el frío como para la humedad. Pero es que además, dan calor ambiental. Hacen las estancias más acogedoras y agradables. No obstante, debes saber que también existen cortinas térmicas, que añaden un plus de aislamiento a cualquier estancia. Son perfectas para esta época del año, pero también para evitar el calor en verano. En cualquier caso, en esta época del año apuesta por los colores oscuros, porque son los que atrapan más y mejor el calor. 

Añade decoración y mobiliario

¿Sabías que la decoración y el mobiliario también te protegen del frío? Los cuadros, los tapices y los muebles grandes son perfectos para vestir las paredes que están desnudas. Cuando no hay nada en las paredes, el frío suele entrar más rápido que si hubiera un obstáculo de por medio. Si te replanteas redecorar la casa, esta es una buena ocasión para pensarlo. ¿Qué tal si habilitas tu propia biblioteca en casa? Los libros revestirán la pared y te ayudarán a ganar calor. 

Otras fuentes de calor

No hay que renunciar a ellas, porque son perfectas para entrar en calor y ganar confort. La bolsa de agua caliente, los saquitos de semillas, los calcetines térmicos… Son complementos clásicos, pero funcionan a las mil maravillas para ganar calor. Tal vez con una bata y una manta puedas ahorrarte algunos grados en calefacción, que como sabes, incrementan notablemente la factura eléctrica y de gas.

Ventanas y ventilación

Aunque no te lo parezca, ventilar todos los días es muy importante. Son suficientes diez minutos para hacer desaparecer los malos olores y descargar el ambiente, pero también para ganar enseguida sensación de calor en el hogar. Por otra parte, aprovecha las horas de sol para que entre calor y cierra en cuanto anochezca.

Luces y velas

Las luces que utilices en tu casa deben ser LED: si no has hecho el cambio, deberías planteártelo desde ya. Si te gusta, también puedes utilizar velas, especialmente en habitaciones pequeñas. Conseguirás aumentar el calor ambiental fácilmente. Eso sí, asegúrate de situarlas en espacios seguros y de apagarlas si te marchas de casa.