Pocas cosas hay tan desagradables como abrir la nevera o el frigorífico de casa y que huela mal. Si somos un poco desorganizados o estamos pasando una mala época en la que nos cuesta tener todo en su sitio, es muy normal que pase. A veces se nos olvida un alimento que termina por colonizar el frigorífico de mal olor. Y es abrir el frigorífico y producirse un estallido de aromas desagradables.
Lo peor de todo es que, además de contribuir al desperdicio alimentario, los alimentos que huelen mal (porque están podridos o echados a perder) afectan a la frescura, el sabor y el olor del resto de productos que también están en el frigorífico. Afortunadamente, existen trucos efectivos para eliminar los malos olores y hacer que tu nevera siempre tenga un aroma fresco y agradable. Vamos a descubrirlos.
1. Vinagre blanco y bicarbonato de sodio para los malos olores
La combinación de vinagre blanco y bicarbonato de sodio es una poderosa arma contra los malos olores en la nevera. Coloca un recipiente pequeño con vinagre blanco en uno de los estantes y otro con bicarbonato de sodio en la puerta. Estos ingredientes absorberán y neutralizarán los olores desagradables, dejando un ambiente más fresco. También puedes:
- Colocar una caja abierta de bicarbonato de sodio en cada estante y renovarla cada mes
- Situar un recipiente con vinagre de manzana en la nevera y dejar que actúe durante toda la noche
- Limpiar regularmente (una vez al mes) los estantes y compartimentos con una solución de agua y vinagre
2. Usa carbón activado para absorber malos olores en la nevera
El carbón activado es un material ampliamente conocido por su capacidad para absorber olores. Puedes adquirirlo en cualquier tienda y colocar varios trozos de control activado en un recipiente. El carbón activado tiene que cambiarse cada dos semanas para que mantenga su eficacia a la hora de absorber malos olores.
3. El truco de la abuela para eliminar los malos olores es café molido
El café molido no solo es efectivo para eliminar olores, sino que también deja un aroma de lo más agradable. Si no quieres comprar carbón activado, puedes usar café molido y ponerlo en tazas situadas en diferentes áreas de la nevera. Además de absorber malos olores, añadirá un toque de frescura a tu frigorífico.
4. Limón y naranja, ambientadores naturales para la nevera
Los cítricos son de sobra conocidos por sus propiedades refrescantes. Coloca cáscaras de limón o naranja en la nevera para neutralizar olores y añadir un aroma cítrico. Asegúrate de cambiar las cáscaras cada pocos días para mantener la frescura y no conseguir el efecto contrario. De hecho, si te gusta el aroma de la naranja y el limón, puedes usar estas frutas para añadir un aroma agradable al ambiente y mejorar la calidad del aire en tu casa.
5. Aceites esenciales en bolas de algodón para añadir buen aroma
Vamos a por otro truco que puede ser interesante. Se trata de impregnar bolas de algodón con aceites esenciales refrescantes como menta, limón o eucalipto. Coloca las bolas en la nevera en diferentes lugares para eliminar los malos olores, pero también para añadir aromas agradables y frescas al frigorífico. Estas mismas esencias pueden ayudarte a perfumar tu casa.
6. Harina de maíz o fécula de maíz como absorbentes naturales en la nevera
Y hemos dejado como última opción la harina de maíz o la fécula de maíz, que son absorbentes naturales. Puedes colocar un recipiente pequeño con harina de maíz o fécula de maíz en la nevera para absorber la humedad y los malos olores. Te vendrá muy bien, pero tendrás que reponerla cada dos semanas. k
💡 No todas las soluciones funcionan igual de bien para todo el mundo. Por tanto, te recomendamos ir probando qué puede ir mejor en cada caso. 🫧🧽 No obstante, es muy importante que mantengas una limpieza regular y compruebes a menudo qué alimentos tienes próximos a caducar. Seguro que te ayuda tenerlos todos bien etiquetados, en botes o fiambreras transparentes y, ante todo, no acumular sin necesidad. Prueba a realizar una lista de la compra inversa para no desperdiciar alimentos y, de paso, ahorrar.