La apertura al público de los gimnasios todavía tendrá que esperar un poco. Y aunque el paso se plantea para la Fase 1, todavía serán muchos los que permanezcan cerrados o abran únicamente con cita previa. En algunas de las provincias que pasaron a esta fase este lunes 11 de mayo, los gimnasios han abierto, pero la realidad de estos espacios de culto al cuerpo es bien distinta a la que estábamos acostumbrados. Pero, ¿qué hay de normal en esta nueva realidad que nos toca transitar?

Aquellos gimnasios que han abierto sus puertas han tenido que extremar al máximo las medidas higiénicas de protección. Por ejemplo: hay que desinfectarse las manos y la suela de las zapatillas a la entrada. El aforo, en todos los casos, es del 30% y las máquinas pueden usarse solo de manera parcial. Concretamente, una de cada tres.

En las clases, que lógicamente ahora están mucho menos concurridas, hay que respetar de manera estricta la distancia de seguridad con el resto de personas. Al finalizar los entrenamientos, se realiza la desinfección preceptiva y los vestuarios permanecen cerrados. Las duchas después de ejercitarse tendrán que realizarse en casa.

Pero, ¿qué podemos hacer en aquellas provincias en las que todavía no se ha pasado de fase? ¿Y las personas que no quieran o puedan acudir a los gimnasios en estas condiciones? En este caso, no les quedará más remedio que seguir ejercitándose desde casa. Aquí tienes cinco propuestas y recursos útiles para no perder la forma mientras dure esta situación.

1. Sigue sesiones de ejercicios online

Puedes hacerlo a través de YouTube o en Instagram. Algunos deportistas y entrenadores profesionales han puesto su experiencia al servicio de todas aquellas personas que querían seguir entrenando durante el confinamiento. Te recomendamos seguir a instagramers tan famosos como David Marchante (@powerexplosive), Verónica Costa (@vikikacosta) o Jesús López (@pikertrainer). En YouTube puedes conectarte a Gym Virtual o Sascha Fitness para asistir a clases en directo, todos los días de la semana. 

2. Descárgate aplicaciones

Las aplicaciones para el móvil o la tableta son todo un mundo por explorar. Si te pones a indagar entre las mejores aplicaciones de fitness, encontrarás decenas y decenas que son del todo recomendables. ¿Qué te proponemos nosotros? Pues una selección de las mejores. Puedes probar Strong, JEFIT o Nike Training Club. Todas están disponibles tanto para iOS como para Android y son gratuitas. Incluyen rutinas de entrenamiento, consejos e información sobre deporte, salud y nutrición.

3. Practica el yoga

El yoga es una disciplina que alimenta el alma, pero también se trata de una práctica física de alto nivel. Hacerlo y hacerlo bien es importante para evitar lesiones y para ganar fuerza y elasticidad. Con el tiempo es posible y, lo mejor, puedes empezar a tu ritmo. Verás cómo progresas pronto. Para empezar puedes usar aplicaciones como Down Dog, Find What Feels Good o Yoga para principiantes. También puedes suscribirte a canales de YouTube de éxito, como Xuan Lan Yoga o Malova Elena, con infinidad de ejercicios de yoga partiendo de cero.

4. Ejercicio con niños

Los niños sigue en casa con nosotros, de modo que es preciso poner en marcha algunas rutinas para que, aunque salgan una hora al día, puedan seguir ejercitándose. Aquí tienes algunas apps que pueden resultaros útiles para hacer ejercicio, rutinas de ejercicios matutinos o Yoga para niños. En YouTube también hay canales interesantes, como por ejemplo Smile and Learn y YOGIC. A través de estos espacios podéis practicar el yoga en familia y sentiros mejor en compañía.

5. Relájate y medita

Hacer ejercicio físico, aunque sea un poco, es muy beneficioso para la salud. Pero, ¿qué tal si nos relajamos un poco? Si ya has cumplido con tus rutinas de ejercicios, quizá lo que necesitas ahora mismo es un poco de relajación o meditación. Puede que al principio te cueste un poco. Prueba con las meditaciones guiadas de Somos Gaia o Mindful Science. Sin embargo, verás que en la situación en la que estamos, iniciarte en la meditación te vendrá de perlas para estar mejor contigo mismo. Confía en ti y sé paciente. Seguro que todo saldrá bien y poco a poco tendrás ocasión de recuperar tus rutinas, también fuera de casa.