La consejera delegada de Bankinter, María Dolores Dancausa, ha asegurado que el banco cuenta con provisiones «más que de sobra» para afrontar un posible deterioro económico, dado que todavía mantiene un exceso de dotaciones extraordinarias por la Covid-19 superior a los 100 millones de euros, y ha mostrado el compromiso de la entidad para acogerse a las medidas que acuerde el sector con el Ministerio de Asuntos Económicos para ayudar a familias vulnerables con dificultades para hacer frente al pago de sus cuotas hipotecarias.
Durante la presentación de resultados del tercer trimestre de 2022, en la que se ha anunciado que Bankinter obtuvo un beneficio neto de 430,1 millones de euros durante los nueve primeros meses de este año (un 21,2% más), la consejera delegada ha vaticinado que Bankinter cerrará «un buen ejercicio 2022», dado que por el momento no ha identificado ningún patrón de cambio de comportamiento en ninguno de los segmentos del grupo y la morosidad sigue sin reflejar la incertidumbre económica, con una caída de 30 puntos básicos en el año, hasta el 2,1%.
Ante los reiterados mensajes de prudencia en la dotación de provisiones y la distribución de dividendos que está realizando el supervisor bancario por el entorno económico actual, Dancausa ha descartado que Bankinter vaya a realizar algún cambio en su política de distribución de dividendos, que consiste en un ‘pay out’ del 50% en efectivo.
«No hay ninguna razón para tenerlo que disminuir, hemos sido muy consistentes a lo largo de los años y hay que diferenciar entre entidades que tengan necesidad de ser un poco más prudentes y otras que no lo necesitamos», ha apuntado.
En la misma línea, ha recordado que Bankinter no ha liberado las provisiones extraordinarias dotadas tras la irrupción de la pandemia del coronavirus, por las que todavía cuenta con un excedente superior a 100 millones de euros. «En ese sentido, vamos muy sobrados para afrontar un periodo económico que pueda venir de mayor dificultad», ha asegurado.
En el caso de que finalmente se produzca una recesión económica que provoque un incremento de la morosidad a nivel general, Bankinter ayudará a los clientes que deban afrontar situaciones difíciles.
Las familias con dificultades podrán pedir una extensión del plazo de su hipoteca de hasta cinco años
En este sentido, se ha referido al «principio de acuerdo» entre las asociaciones bancarias y el Ministerio de Asuntos Económicos para ayudar a clientes vulnerables que se enfrenten a problemas para pagar sus cuotas hipotecarias ante la subida de tipos de interés y de la inflación.
En virtud de dicha propuesta, que no está cerrada y que será un anexo al Código de Buenas Prácticas, la banca extendería el plazo de las hipotecas que se encareciesen más de un 30% por la subida del euríbor a aquellas familias vulnerables con ingresos inferiores a tres veces el Indicador Público de Rentas con Efectos Múltiples (Iprem).
Si bien el «cliente tipo» de Bankinter cuenta con un nivel económico medio-alto y, por tanto, tiene mayor capacidad de ahorro para afrontar ciclos económicos difíciles, en el caso de que se presenten clientes con dificultades para afrontar el pago de su hipoteca por la subida del euríbor y la inflación, el banco les ayudará.
«Estamos de acuerdo en tomar medidas concretas para ayudar a las familias más vulnerables a que puedan pagar sus cuotas hipotecarias tomando las medidas que se acepten por parte de todo el sector y esto está pendiente de cerrar, aunque ya están muy avanzadas esas medidas que pronto se harán públicas por quien corresponda. Lo que se apruebe y se incorpore al Código de Buenas Prácticas lo cumpliremos«, ha afirmado la directiva, quien ha añadido que Bankinter seguirá negociando individualmente con los clientes con dificultades, «como siempre ha hecho».
Pide al Gobierno reformas «estructurales y liberizadoras»
La consejera delegada de Bankinter ha señalado que, en un escenario de dificultades económicas e incertidumbre, debe haber una respuesta coordinada por parte del Gobierno, la oposición y las empresas para hacer frente a la inflación.
«Y sobre todo, lo que hace falta son reformas estructurales y liberalizadoras que permitan incrementar el crecimiento económico en el medio plazo, que estimulen la inversión productiva y que dinamicen el empleo, y hace falta un ajuste del gasto no productivo», ha propuesto Dancausa.
En esta línea, la directiva ha reprochado que las medidas que se han tomado en España no vayan en esa dirección. «Aumentar el gasto no parece la mejor receta para mejorar la situación económica, como tampoco lo es subir tasas impositivas. Soy más partidaria de que para generar riqueza en el país hay que tener ingresos sostenibles, no a base de crear impuestos nuevos ni de subir las tasas que ya existen en este momento», ha recalcado.
Por ello, ha reafirmado su posición sobre el nuevo impuesto a la banca, que se encuentra en tramitación parlamentaria. Si bien ha explicado que desconoce los detalles técnicos de la medida, Dancausa ha recordado que el gravamen le parece «injusto, arbitrario, discriminatorio y confiscatorio», además de no estar justificado.
Sobre el argumento del Gobierno de que se grava al sector para que devuelva las ayudas del rescate financiero de la anterior crisis, la directiva ha recordado que Bankinter nunca ha recibido ayudas públicas y que además contribuyó al citado rescate. «Si se hace para devolver ayudas, deberían dejar libres a los bancos que no recibieron esas ayudas», ha señalado Dancausa, quien no descarta tomar medidas ante los tribunales si se ven menoscabados los intereses de sus accionistas.