La banca española inicia esta semana su proceso de desescalada. Se reabrirán oficinas y se reincorporarán empleados a sus puestos de trabajo.Esta medida coincide con el salto de varias provincias a la fase 1 del desconfinamiento por la pandemia la COVID-19

Las entidades de la banca irán testando las necesidades del negocio para volver a la ‘nueva normalidad’ de forma gradual y ordenada. Y seguirán siempre las recomendaciones de las autoridades sanitarias, aplicando los protocolos de protección de empleados y clientes.

Por lo general, en cada oficina habrá un número de empleados menor de lo habitual. De este modo, no todos ellos tendrán que acudir a sus puestos de trabajo, sino que podrán turnarse. En los servicios centrales de la banca, el teletrabajo será la preferencia por el momento.

En el retorno a la normalidad de la banca, cada entidad está trabajando en sus propios planes y no todas seguirán el mismo camino. De igual manera que algunas optaron por cerrar la mayor parte de su red y otras han seguido operando con más del 90% de sus oficinas durante el estado de alarma. El objetivo era garantizar el acceso a los servicios esenciales en todos los municipios en los que operan. Por lo tanto, son las primeras las que más notarán la desescalada.

La banca inicia la desescalada: ¿cómo lo hará cada entidad?

Banco Santander, que operaba con el 50% de la red (la mitad a diario y la otra mitad solo los lunes y los jueves), reabrirá esta semana otras 189 sucursales. Esto supone mantener operativa el 60% del total. Desde el 11 de mayo, estarán abiertas 1.919 sucursales, de las que 1.208 oficinas abrirán cada día. Otras 711 lo harán los lunes, miércoles y jueves.

El mismo lunes, Banco Sabadell abrirá otras 146 oficinas, pasando del 70% al 77% de sucursales operativas, con un total de 1.441. El 65% de la plantilla hará teletrabajo, unos 11.140 trabajadores. Mientras que los casi 6.000 restantes acudirán a sus puestos habituales. Mantendrán turnos rotativos y la flexibilidad horaria para facilitar la conciliación.

BBVA es la entidad que más oficinas ha cerrado durante el estado de alarma (ha estado operando solo con el 30% de la red y el 10% de los empleados). Ha iniciado su desescalada en los últimos días, con unas 200 reaperturas, y la extensión de empleados en sus puestos de trabajo habituales al 14% de la plantilla.

Bankinter, que cerró la mitad de sus 360 oficinas, también comenzará a reabrir sucursales a partir del lunes. Así, se irán reincorporando los trabajadores (actualmente teletrabaja el 90% de los 5.000 empleados). Lo harán tanto a las oficinas (con menos empleados por oficina de lo habitual) como a los servicios centrales. Aunque en este segundo caso un número muy bajo y de manera gradual.

El resto de los bancos ha mantenido un porcentaje muy alto de su red de oficinas operativa, por lo que la desescalada será menos notoria. En el caso de CaixaBank, que es la entidad que más oficinas tenía abiertas (el 90% de sus 4.515 oficinas), prevé finalizar el mes de mayo con el 95% de la red operativa y el 75% de la plantilla en sus puestos de trabajo, frente al 50% actual. En los servicios corporativos y territoriales, se mantendrá preferentemente el teletrabajo hasta septiembre.

Una vuelta al trabajo gradual

Bankia también ha mantenido el 90% de las oficinas abiertas. Sin embargo, está trabajando en un plan para la vuelta al trabajo de forma gradual. Tanto en oficinas como en servicios centrales, que debería producirse a lo largo de la segunda mitad de mayo.

De su lado, Cajamar ha mantenido abierto también casi el 90% de sus 933 oficinas. Ahora ha comenzado progresivamente con las reaperturas, permaneciendo pendientes de retomar su actividad solo 44 oficinas, de las que este lunes se abren 33. De este modo, la entidad ya tendrá funcionando el 98,8% de la red. En cuanto a los profesionales, en el mes de junio espera que el 80% trabaje con normalidad y el resto continúe teletrabajando.

En cuanto a Unicaja, que también ha mantenido abierto el 80% de sus 1.031 oficinas durante el confinamiento, ha comenzado esta semana una gradual ampliación de los días en que abre una parte de las sucursales que tenían horario parcial. La próxima semana tiene prevista una paulatina apertura de buena parte de las 173 oficinas que permanecen cerradas. Empezarán por abrirlas tres días por semana.

El grupo Kutxabank, que arrancó la pandemia con alrededor de un 70% de oficinas abiertas (un 62% de las oficinas de Kutxabank y un 80% de las de Cajasur), aboga por desescalar en función de una monitorización semanal que comenzará el lunes, de manera que poco a poco vayan incorporándose más empleados y oficinas en las próximas semanas.

Lo mismo sucede en el caso de Ibercaja, que apenas mantiene 32 oficinas cerradas por el estado de alarma. Las abrirá progresivamente en las próximas semanas conforme evolucione la pandemia de la COVID-19 y se levanten las restricciones.