Ha llegado ese momento que divide a las personas en dos facciones: los que desean desprenderse de la decoración de Navidad cuanto antes y los que prefieren mantenerla durante algún tiempo, ya sea por pereza a desmantelarlo todo o por tradición. Y es que el Belén, y específicamente el Belén, no debería quitarse hasta el día de la Candelaria, el 2 de febrero. Sea como sea, es cierto que nada más terminar la festividad de Reyes, hay que regresar a la rutina. Los adultos al trabajo y los niños al colegio. De modo que es un poco extraño llegar a casa y encontrarse todavía con el árbol, las luces y el espumillón invadiéndolo todo.
Una buena manera de dar carpetazo a las fiestas navideñas y empezar el nuevo año con las energías renovadas es quitando toda la decoración navideña y apostando por una de nueva. Este es un momento perfecto para replantearse el estilo de nuestro hogar, adquirir decoraciones nuevas o hacer alguna reforma pequeña. ¿Te apetece poner en marcha este nuevo comienzo? Vamos a ayudarte con algunos trucos que puedes aplicar fácilmente y que te darán la vitalidad que necesitas para empezar 2023 con positividad y ganas.
Hola regalos, adiós trastos viejos: un extra de almacenamiento
Después de Navidad hay que hacer sitio para alojar los nuevos regalos, especialmente si tienes niños en casa. Pero también nos pasa a los mayores. Este es un buen momento para desechar todo aquello que no utilices ni vayas a utilizar en el futuro para dar la bienvenida a aquellas cosas que sí utilizarás. Nuestras casas están llenas de objetos que guardamos por si acaso, pero que en realidad jamás utilizamos. Puedes aprovechar esta circunstancia para elegir muebles o sistemas de almacenaje que sean bonitos a la vista y que además resulten útiles para guardar herramientas, útiles y objetos. Es un buen ejercicio de higiene mental, que te ayudará a priorizar tus necesidades y a disfrutar de un hogar más ordenado, espacioso y libre de cosas superfluas.
Nuevos rincones que inviten al optimismo y a la calma después de Navidad
¿Qué pondrás en el grandioso espacio que quedará libre después de guardar el árbol de Navidad? Piensa en aquello que te haría sentir feliz, relajado y en calma. ¿Tal vez un sillón y una mesita con velas? ¿Y si reservas este espacio para hacer tus sesiones de yoga o relajación diarias? Tal vez prefieras un pequeño rincón de lectura, en el que relajarte después de una dura jornada… Es importante que destines ese espacio a una función que te ilusione y te haga suspirar al llegar a casa. ¡Oh, hogar dulce hogar! En realidad no hará falta que compres nada nuevo. Basta con recolocar aquellos elementos que tienes desperdigados para crear un espacio con sentido.
Plantas nuevas que sigan dando alegría a tu hogar después de Navidad
Las plantas nunca deberían quedar fuera de nuestra decoración cotidiana, pero es fácil que en Navidad sobresalgan otros elementos, como el árbol, las figuritas o las guirnaldas. Las plantas siempre son un acierto, aunque también puedes decantarte por centros de flor preservada, naturales pero resistentes, que aporten nuevos colores a las diferentes estancias de tu casa y te transmitan sensaciones buenas. Si optas por las plantas naturales, podrás dedicar tiempo nuevo a sus cuidados y este también es un propósito de año nuevo interesante, tal vez poco productivo, pero absolutamente relajante.
Que la luz siga contigo: otras maneras de iluminar
No hace falta que sea Navidad para tener un hogar iluminado con gusto. Es cierto que este es el momento de retirar la iluminación navideña, pero también es posible que al quitarla, notes que te falta ese plus de luz que suelen aportar las guirnaldas en Navidad. Hay opciones. ¿Sabías que existen guirnaldas decorativas para instalar en cualquier estación del año? Las que hoy encontrarás en cualquier tipo de establecimiento de decoración o bricolaje están armadas con luces LED, de modo apenas lo notarás en el consumo. De hecho, si quieres una iluminación más tenue y cálida en cualquier parte de la casa, puedes dejar encendida la guirnalda y apagar las luces fijas. Verás que el efecto que consigues es precioso.
Textiles renovados para un aire completamente nuevo
Y terminamos con una última sugerencia, en este caso vinculada a los textiles. No les prestamos mucha atención, pero son clave para darle un vuelco a la decoración de una casa. En este caso, te recomendamos cambiar las fundas de los cojines, por unas que tengan colores o estampados vivos y alegres, alejados de los tonos navideños. Puedes hacer lo propio con la alfombra o las cortinas. Verás que con muy poco presupuesto consigues darle un giro de 180 grados a cualquier estancia de tu hogar, especialmente al salón, pero también a los dormitorios.
Y tú, ¿cómo tienes pensado decorar tu casa después de Navidad? Comparte con nosotros tus sugerencias.