Decorar tu casa de alquiler puede ser un verdadero quebradero de cabeza si te propones llevar a cabo una tarea de renovación inmensa y costosa. Lo más lógico, a la hora de alquilar una vivienda, es que el uso que vayas hacer de la misma sea temporal. Es decir, aunque los contratos de alquiler son de cinco años, las personas que alquilan suelen cambiar de vivienda más a menudo.

No tienen la vivienda en propiedad y, por tanto, no es necesario que asuman determinados costes. Los inquilinos ni tan siquiera están obligados a asumir todas las reparaciones en un piso de alquiler. No, por norma general. Esto hace que:

• No puedan hacer reformas de calado en una vivienda que no es suya (salvo excepciones o pactos puntuales con el propietario)
• No deban aplicar grandes cambios decorativos en las diferentes estancias

Es cierto que pueden darse excepciones, en aquellos casos en los que exista algún tipo de pacto puntual con el propietario. Como por ejemplo, reformar la cocina a cambio de la cuota del alquiler, hasta alcanzar el importe equivalente al coste de la reforma. También se pueden pactar reformas decorativas, solicitando previamente la opinión y el consentimiento del propietario. En cualquier caso, siempre es necesario que exista una comunicación fluida entre inquilino y propietario, además de un acuerdo por escrito.

¿Qué es lo más recomendable, entonces? Bueno, aunque llegues a acuerdos con el propietario, queremos darte algunas claves y consejos para decorar tu casa de alquiler sin poner la vivienda patas arriba. ¿Empezamos?

1. Cuelga cuadros sin necesidad de agujeros

Afortunadamente, hoy existen infinidad de soluciones para colgar cuadros sin necesidad de hacer agujeros en la pared. Lo recomendable siempre es aprovechar aquellos agujeros que ya estén hechos. Y en caso de querer colgar cuadros decorativos nuevos en las paredes, usar soluciones que no exijan el uso de un taladro: hay tiras para cuadros, clavos y cintas adhesivas. Algunas pueden llegar a sostener hasta un kilo de peso. No obstante, si no te queda más remedio que hacer agujeros, pídele siempre permiso al propietario de la vivienda.

2. Coloca alfombras en las partes de suelo más desgastadas

Es muy habitual que algunas partes del suelo se desgasten más que otras. Esto se produce en zonas que son de paso (pasillos, zonas de entrada y salida) o que sufren más deterioro por efecto de agentes dañinos (suciedad, humedad, vertidos…), especialmente en estancias como la cocina o el baño. Reformar el suelo es altamente costoso y como inquilinos no nos corresponde. Una solución práctica y económica es colocar alfombras en aquellas partes más degradadas.

3. Instala tejidos en las partes más deterioradas o que necesiten una reforma

A medida que una vivienda envejece, algunas partes se van deteriorando y necesitan reformas. Si no eres el propietario, no te corresponde hacerla, especialmente si va a ser costosa. Una buena solución a este problema, que además nos permitirá ganar intimidad e incluso ganar armarios, es la de instalar tejidos a modo de cortinas. Podemos ganar armarios y nuevas zonas de almacenamiento, además de separar estancias, como escaleras o un vestidor para una habitación.

4. Dale una mano de pintura a las paredes

Seguro que el propietario de la vivienda no pone ninguna pega. Dar una mano de pintura a una vivienda es la solución a muchos problemas estéticos graves, como la suciedad en las paredes y los pequeños desconchones. Lo que recomendamos, en todo caso, es optar por una paleta de colores suave: blancos, blancos rotos, piedra, tierra…  Ganarás luz y darás un aire nuevo a la vivienda. Si te atreves con algo más, quizá puedas optar por algún estampado floral con papel pintado. Incluso puedes ponerlo en el baño.

5. Elige vinilos para los desconchones irreparables

Si no te apetece pintar, porque te da pereza y ahora mismo no puedes hacerlo tú mismo, tal vez puedas pegar algunos vinilos bonitos. Puedes usarlos para camuflar rayaduras, golpes y otros defectos irreparables por ahora. Sería interesante que eligieras vinilos de buena calidad, que puedan despegarse fácilmente cuando te vayas del piso. No en vano, si al quitarlos arrancas la pintura, quizá tengas problemas con el propietario.

6. Pinta los marcos de las ventanas para darles un nuevo aire

Rascar y pintar, todo es empezar. Si vas a pintar con el mismo color que tienen, quizá no tengas que pedirle permiso al propietario. Ahora bien, si quieres innovar y darle un toque colorido a los marcos de las ventanas, tendrás que comentarlo con el propietario. Fíjate en las ideas que te sugerimos más arriba: en todas ellas se ha apostado por colores llamativos, pero el efecto es ciertamente deslumbrante. 

7. Coloca pomos nuevos en los armarios y mobiliario en general

A veces sucede que en las viviendas de alquiler se incluyen muebles y estos no pueden moverse o cambiarse. Si esto es así y los muebles son muy viejos o feos, quizá puedas sugerirle al propietario personalizarlos y recuperarlos. En algunos casos puedes lograr un efecto verdaderamente rompedor colocando pomos nuevos en los armarios y el resto de mobiliario. Si tienes el permiso del dueño de los muebles, tal vez puedas incorporarles vinilos en las puertas. Verás qué manera de estrenar muebles nuevos tan rápida y sencilla. 

8. Emplea fundas y tejidos variados para los sofás

¿Te ha tocado un sofá que no querías? Si hay muebles en la vivienda, seguramente también tengas que quedarte con el sofá. Y esta es, qué duda cabe, una pieza indispensable en cualquier hogar cómodo que se precie. Lo que puedes hacer en este caso es comprar unas fundas adaptables y colocar una gran variedad de tejidos que puedan camuflar cualquier estampado deteriorado o feo. Elige cojines de colores y trata de combinar bien los colores, para que un sofá aparentemente feo pueda convertirse en un nido absolutamente agradable.

9. Elige muebles portátiles para cualquier estancia

Seguramente te hagan falta algunos muebles nuevos, de modo que si vas a comprar algunos, debes tratar de que sean móviles o portátiles. Por ejemplo, puedes elegir una mesa con ruedas para el salón, un carro que pueda funcionar como mesita de noche moderna o una mesa de centro desplazable hacia cualquier punto. Son piezas que te resultarán muy cómodas y que te podrás llevar fácilmente en cuanto decidas abandonar el piso .

10. Sustituye elementos siempre que pueda revertirse el cambio

En definitiva, vamos a hacerte una última recomendación si quieres decorar tu casa de alquiler. Si vas a sustituir o cambiar elementos en una vivienda, aplícate una máxima. Que el cambio sea reversible: así, aunque instales grifos, duchas, pomos, lámparas y otros elementos, debes poder sustituirlos por las piezas originales, dejando así el piso tal como estaba y evitando cualquier posible malentendido con el propietario.

Resumiendo, para decorar tu casa de alquiler con éxito… 

• Evita hacer reformas costosas y de gran envergadura en una vivienda que no es tuya
• Consulta siempre cualquier cambio (por pequeño que te parezca) con el propietario
• Elige siempre soluciones económicas y reversibles
• Aplica el sentido común y pídele al propietario reformas si son urgentes y vitales