Ahora quizá no sea tan habitual, pero en las casas de nuestras abuelas, el papel pintado era un must. La mayor parte de dormitorios contaban con papel de pared de colores súper vivos y estampados, de todo menos discretos. Ahora el papel pintado ha vuelto, pero podemos encontrarlos en infinidad de tonalidades y patrones un poco más discretos. También se ha incrementado la calidad del papel, de modo que incluso, si se desea, se puede poner papel pintado en el baño o en cualquier otro espacio de la casa considerado como húmedo.
Si estás reformando una casa antigua o quieres renovar la decoración de la casa del pueblo, seguramente te toque tomar una decisión con respecto al papel pintado. Puedes quitarlo y pintar las paredes de nuevo o apostar de nuevo por el papel. Hagas lo que hagas, será necesario que prepares las paredes para quitar el papel antiguo y dar el siguiente paso en tu proyecto de decoración. ¿Nos ponemos manos a la obra? O, mejor dicho: ¡manos al papel!
Preparar las paredes para quitar el papel de pared
Antes de empezar a despegar el papel de la pared, tendrás que preparar la habitación de manera adecuada, para no dañar otras partes de la estancia con los productos que utilices. Por otra parte, será necesario que dispongas de una serie de herramientas. Veamos el paso a paso.
1. Proteger el suelo antes de quitar el papel de pared
Coloca lonas o trapos viejos en el suelo para evitar dañarlo con el agua o el pegamento que puedan caer durante el proceso. Especialmente si tienes un suelo de parquet.
2. Reúne las herramientas que necesitas para quitar el papel de pared
Lógicamente, necesitarás una espátula o rasqueta, un rociador con agua, un trapo o esponja, y posiblemente un cuchillo o cuchilla para las áreas difíciles, es decir, aquellas en las que el papel pintado esté más adherido.
3. Prepara el área que vas a mejorar quitando el papel de pared
Tienes que retirar los muebles de la habitación y colocarlos en el centro. También tienes que cubrirlos con plástico para protegerlos del agua y el pegamento. Aprovecha que los mueves para mejorar su aspecto, quitar pegatinas de muebles y espejos o hacer otras reparaciones.
Cómo quitar el papel de la pared paso a paso
Una vez que hayas completado estos pasos, podrás comenzar a quitar el papel de pared. Sigue estos pasos:
- 1. Comienza por los bordes. Utiliza la espátula o rasqueta para levantar suavemente un borde del papel de pared. Trata de despegarlo lentamente para evitar dañar la pared.
- 2. Rocía con agua. Una vez que hayas levantado un borde del papel, utiliza el rociador para humedecer el papel. Esto ayudará a aflojar el pegamento y facilitará su eliminación.
- 3. Despega el papel. Una vez que el papel esté bien empapado, comienza a despegarlo de la pared. Trabaja lentamente, asegurándote de no tirar demasiado fuerte para evitar daños.
- 4. Retira el papel restante. Si el papel se rompe o se desprende en pedazos pequeños, no te preocupes. Sigue rociando agua y trabajando sección por sección hasta que puedas eliminar todo el papel.
- 5. Limpia la pared. Después de quitar todo el papel, utiliza un trapo o esponja húmeda para limpiar cualquier residuo de pegamento que pueda quedar en la pared. Asegúrate de que esté completamente seca antes de continuar con el siguiente paso.
Poner otro papel pintado en la pared o pintar
Una vez que hayas quitado todo el papel de la pared, habrá llegado el momento de decidir si vas a aplicar otro papel o pintar las paredes. Aquí tienes algunas consideraciones extra:
Para poner otro papel pintado en la pared
Si quieres poner otro papel en la pared, puedes hacerlo tú mismo porque es un proyecto DIY barato. Eso sí, tienes que asegurarte de que la pared esté completamente limpia y seca antes de comenzar. Puedes necesitar aplicar una capa de imprimación para ayudar a que el nuevo papel se adhiera correctamente.
Para pintar las paredes después de quitar el papel pintado
Si prefieres pintar las paredes en lugar de aplicar otro papel, asegúrate de que la pared esté completamente seca y libre de residuos de pegamento. Puede que tengas que lijar la superficie para conseguir un acabado suave antes de aplicar la pintura.
Sea como sea, consulta con tu profesional de confianza para que te asesore en este sentido. Las paredes son muy delicadas y cualquier detalle puede terminar por estropear la colocación del papel o la nueva capa de pintura. ¡Ánimo con ello!