Compartir habitación entre hermanos es una solución estupenda si lo que nos faltan son metros cuadrados y habitaciones en casa. Si el piso es pequeño y la familia es numerosa, lo más probable es que el espacio tenga que dividirse a la hora de organizar la habitación infantil o juvenil.

De este modo, los espacios tienen que organizarse con mucho más sentido para que todo esté ordenado y luzca. A través de este artículo vamos a ayudarte a organizar una habitación a compartir entre hermanos con dos objetivos:

• Ganar el espacio y el bienestar que cada uno de los hermanos necesita
• Conseguir una buena convivencia entre los niños, sin discusiones ni peleas

Te proponemos un total de diez soluciones y cuestiones a tener en cuenta los niños van a compartir habitación. ¡Esperamos que te resulten muy útiles! 

Literas o camas en altura en la habitación a compartir

Utilizar literas o camas en altura puede ser una excelente manera de ahorrar espacio en una habitación compartida. Esto libera espacio en el suelo para jugar y colocar otros muebles. Verás que hay muchos modelos de literas, que pueden ajustarse a las necesidades de cada familia. Las camas son un poco más difíciles de hacer, pero el ahorro de espacio es considerable. Y por tanto, puede interesarte.

Separadores en una habitación a compartir

Utiliza separadores de habitación o cortinas para crear espacios privados para cada hermano. Esto les dará privacidad cuando lo necesiten, especialmente a medida que se vayan haciendo mayores. Porque ya se sabe: juntos pero no revueltos. Las separaciones cobran sentido cuando uno de los hermanos ya tiene que ponerse a estudiar y a hacer deberes, pero el otro todavía está en la etapa de juegos, porque es más pequeño.

Apuesta por una organización vertical en el dormitorio

Utiliza estantes y organizadores de pared para aprovechar el espacio vertical de la habitación. Esto puede ser útil para guardar libros, juguetes y otros objetos. Una apuesta interesante, a la hora de elegir mobiliario, es la de optar por estanterías que lleguen hasta el techo. Con ellas estaremos aprovechando todos los metros cuadrados disponibles en vertical y, por tanto, ganaremos mucho almacenamiento. ¡Aunque luego necesitemos una escalera para alcanzar los objetos!

Muebles funcionales para una habitación a compartir

Opta por muebles que tengan múltiples usos, como camas con cajones debajo para el almacenamiento adicional o escritorios plegables que se pueden guardar cuando no se usan. Es una buena manera de optimizar el espacio y aprovechar cada centímetro cuadrado. Debajo de las camas, por ejemplo, hay muchísimo espacio para guardar sábanas, mantas y hasta juguetes. Los muebles móviles (con ruedas o mecanismos) son súper útiles para ir adaptando el espacio a medida que los hermanos crecen y tienen nuevas necesidades.

Los colores y la decoración en una habitación compartida

Elige una paleta de colores y una temática de decoración que sea del agrado de ambos hermanos. Esto puede ayudar a unificar la habitación y crear un ambiente armonioso. Cuando son más pequeños es fácil, porque son los padres y madres los que decidimos por ellos. En cualquier caso, nuestra recomendación siempre es optar por colores neutros (no olvides que la elección de colores es fundamental) para generar ambientes relajados y tranquilos: el blanco, el beige, el color piedra y las tonalidades pastel son idóneas.

Zonas de estudio individuales para cada hermano

Si los hermanos son lo suficientemente mayores para necesitar espacios de estudio, asegúrate de que cada uno tenga su propio escritorio o área de estudio dentro de la habitación. Una de las obligaciones de los niños, a medida que crecen, es la de hacer deberes y estudiar. Por tanto, es fundamental que tengan espacio para concentrarse y trabajar, sin que tengan que pelearse por lugar de la mesa en qué ubicarse. Si no hay espacio en la habitación, tal vez puedas idear una zona de estudio en otra habitación de la casa.

Cestas y contenedores para organizar ropa y juguetes

Utiliza cestas y contenedores para organizar juguetes, ropa, y otros objetos personales. Etiqueta los contenedores para que sea más fácil mantener todo en su lugar. En tiendas de decoración encontrarás infinidad de soluciones para guardar la ropa sucia y limpia, pero también para los juguetes, las prendas limpias, las libretas y todos los útiles escolares. Usa etiquetas y sistemas de colores para ayudar a los niños a encontrar sus cosas. La organización es clave si hay dos peques en una misma habitación.

Pone en marcha la rotación de juguetes para ahorrar espacio

Si hay muchos juguetes, tienes que considerar poner en marcha la rotación. ¿De qué estamos hablando exactamente? Pues de ir guardando juguetes en cajas, dejando a la vista solo algunos y rotándolos cada cierto tiempo. Es una buena manera de asegurarnos de que todo queda ordenado, pero que al mismo tiempo se van aprovechando todos los juguetes disponibles y los niños no se cansan de jugar siempre a lo mismo. Cuando saques uno de esos juguetes, los peques lo celebrarán como una gran novedad.

Paredes magnéticas o de pizarra para jugar u organizar

Usa pintura magnética o de pizarra en una pared para que los niños puedan dibujar y pegar imanes directamente en la pared. Esto puede ser una forma creativa de personalizar su espacio y es una propuesta, no solo para habitaciones compartidas, sino para cualquier zona de la casa que quieras hacer muy suya. Y es que gracias a estas paredes magnéticas todos podréis personalizar, añadir dibujos, contenidos y ser creativos y organizados a partes iguales.

Involucra a los niños en la organización de su habitación compartida

Enseña a los niños a ser responsables de su espacio y a mantenerlo ordenado. Esto les ayudará a desarrollar hábitos de organización desde una edad temprana. Te recomendamos poner sobre la pizarra algunas de las leyes que regirán este espacio compartido. Más allá de presentar inconvenientes, serán un ejercicio estupendo para que los niños aprendan a compartir, a cooperar y establezcan una relación cercana y bonita entre hermanos. ¡Es lo que cuenta!