Con el inicio de cada nuevo curso escolar, muchas personas deben plantearse un cambio vital importante. Según datos del Ministerio de Universidades, un 15 % de los estudiantes universitarios se desplazan a otra ciudad para poder estudiar. Esto no solo implica un cambio de entorno social, sino que muchas veces, para que su vida como estudiantes sea más práctica y cómoda, también tienen que cambiar de vivienda. Esto significa, en la mayoría de casos, dejar el domicilio familiar para irse a una residencia de estudiantes o compartir piso.

Si no tienen un piso familiar en propiedad, lo más habitual es buscar un piso de alquiler, que además compartirán con otras personas, casi siempre estudiantes, en su misma situación. Estamos hablando, pues, alquileres con contratos que son inferiores a doce meses y tienen ciertas particularidades.

En este artículo vamos a subrayar cuáles son aquellos aspectos que debes considerar si vas a firmar el contrato de alquiler de un piso para el curso escolar.

El contrato de alquiler de un piso para el curso escolar

A la hora de firmar el contrato de alquiler de un piso para el curso escolar, los propietarios tienen dos opciones:

Alquilar la vivienda completa para el curso escolar

Una opción es alquilar la vivienda completa a varios inquilinos para compartir piso. Lo más común es redactar un contrato en el que consten varios titulares, de acuerdo con lo que dicta la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU).

Alquilar el piso por habitaciones durante el curso escolar

Si lo prefieres, también puedes alquilar el piso por habitaciones. En este caso, será imprescindible que redactes un contrato por cada habitación. La legislación que regula estas cláusulas es el Código Civil.

¿Cuánto dura el contrato de alquiler de un piso para el curso escolar?

Pues depende. La mayor parte de contratos son de menos de 12 meses, porque a los estudiantes les interesa tener el piso alquilado durante el curso escolar, que son 9 meses. Esto puede ser así en aquellos casos en los que el estudiante vaya a estar solo un curso, por la razón que sea. Pero cuando hablamos de estudiantes de carrera universitaria, a muchos les interesa conservar el piso durante los cuatro o cinco años que durarán sus estudios.

En estos casos siempre es posible realizar un contrato de un año renovable. Eso sí, durante los meses de verano seguirán ostentando el alquiler y, por tanto, aunque no residan en el piso tendrán que pagar las mensualidades igualmente.

La diferencia, además de la duración de los contratos, radica en los derechos de los inquilinos. Si al propietario no le interesa mantener a los estudiantes que tienen un contrato de alquiler de temporada, podrá echarlos en cuanto termine el período estipulado. En cambio, los contratos de larga duración podrán ser más largos y renovarse periódicamente.

Alquilar piso para el curso escolar: ¿qué tener en cuenta como estudiantes?

Si tienes previsto alquilar piso para el curso escolar como estudiante, te recomendamos prestar atención a estos consejos clave:

• Asegúrate de las condiciones en las que se encuentra la vivienda
• Revisa con lupa el contrato de alquiler, incluyendo inventarios
• Aclara qué gastos asumirá cada parte con respecto a los suministros
• Llega a un acuerdo sobre reparaciones y urgencias domésticas

Alquilar piso para el curso escolar a estudiantes, ¿qué no puede pasarte por alto como propietario?

Si eres propietario y quieres alquilar piso para el curso escolar a estudiantes, resultará indispensable que tengas en cuenta lo siguiente:

• Realiza un inventario del estado del piso, mobiliario y contenidos
• Redacta un contrato de alquiler adecuado (contacta con un profesional)
• Responsabilízate y aclara qué gastos asumirá cada una de las partes
• Deja bien claro desde el principio cómo proceder en caso de urgencias o reparaciones
• Contrata un seguro de impagos del alquiler