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Cómo limpiar el plástico amarillento de electrodomésticos y muebles

Con el tiempo, es común que los electrodomésticos y muebles de plástico blanco o claro se vuelvan amarillos debido a la exposición a la luz, el polvo y otros factores ambientales. Aunque puede ser un proceso gradual, este cambio en el color puede afectar la apariencia general de este tipo de mobiliario y hacer que parezcan más viejos de lo que realmente son.

Pero tranquilidad, porque este proceso no es del todo irreversible. Está claro que no quedarán tan nuevos y relucientes como el primer día, pero debes saber que hay formas efectivas de devolverles el brillo y la blancura (más o menos) original, según los expertos. Si tienes un piso de alquiler o piensas vender tu casa con muebles y electrodomésticos, estos trucos te ayudarán a conseguir una mejor impresión por parte de tus futuros inquilinos o compradores. A continuación, te damos los consejos que necesitas para limpiar el plástico amarillento de tus electrodomésticos y muebles blancos.

Cómo limpiar el plástico amarillento de electrodomésticos y muebles

¿Qué materiales se necesitan para limpiar el plástico amarillento de electrodomésticos y muebles?

Antes de ponerte manos a la obra con para limpiar el plástico amarillento de electrodomésticos y muebles, prepara los siguientes materiales y productos. Verás que todos son productos ecológicos, sin tóxicos y/o respetuosos con el medio ambiente:

  1. Agua tibia
  2. Jabón suave o neutro
  3. Vinagre blanco
  4. Bicarbonato de sodio
  5. Paño suave o esponja no abrasiva
  6. Cepillo de dientes viejo
  7. Protector solar para plástico (opcional)

Cómo limpiar el plástico amarillento de electrodomésticos y muebles paso a paso

1. Empieza por una limpieza básica del mobiliario y los electrodomésticos que se han quedado amarillos

Antes de utilizar productos específicos, los expertos recomiendan intentar limpiar la superficie amarillenta con agua tibia y jabón suave. Utiliza un paño suave o una esponja (sobre todo, que no sea abrasiva) para frotar suavemente y eliminar el polvo y la suciedad superficial. Con eso ya habremos avanzado mucho.

2. Aprovéchate de los poderes del vinagre blanco

El vinagre blanco es muy conocido por sus propiedades desinfectantes y desengrasantes y los expertos en limpieza lo recomiendan para muchos usos. ¿Lo has usado alguna vez? Si la respuesta es no, no te preocupes, tenemos la fórmula: mezcla una parte de vinagre blanco con una parte de agua tibia y aplica la solución sobre la superficie amarillenta. Deja actuar durante unos 15-20 minutos y luego frota suavemente con un paño o esponja. Enjuaga con agua limpia y seca con cuidado.

Cómo limpiar el plástico amarillento de electrodomésticos y muebles

3. Bicarbonato de sodio, otro limpiador súper potente

Vamos a por otro ingrediente milagroso: el bicarbonato de sodio, que es uno de los productos más recomendados por expertos a la hora de hacer limpiezas más naturales. Si no lo has usado nunca, debes saber que se trata de un excelente limpiador y blanqueador natural, perfecto si lo que quieres es limpiar de manera ecológica en casa. Haz una pasta espesa mezclando bicarbonato de sodio con un poco de agua. Aplica la pasta sobre la superficie amarillenta y frota con un cepillo de dientes viejo o un paño suave. Deja actuar durante 10-15 minutos y luego enjuaga y seca.

4. Protector solar para el plástico amarillento

Después de limpiar la superficie, te recomendamos aplicar un protector solar específico para plásticos. Esto ayudará a prevenir la decoloración futura y a mantener la blancura de tus electrodomésticos y muebles. Si no lo has usado nunca, debes saber que este tipo de bloqueadores UV se suelen vender en formato líquido o spray en cualquier droguería. Algunos, además de proteger, llevan componentes para restaurar el brillo y el color perdidos. 

5. Que no se te olvide hacerle un mantenimiento regular

Para evitar que el plástico se vuelva amarillento en el futuro, limpia regularmente tus electrodomésticos y muebles con un paño suave y agua jabonosa. Guárdalos en lugares donde no estén expuestos directamente a la luz solar durante largos períodos o, en su defecto, protégelos con lonas o productos como el que te hemos indicado, específicos contra los efectos de los rayos ultravioleta.

Estos trucos pueden servirte, pero es preciso que antes de dar ningún paso, contactes con el fabricante de tu electrodoméstico o mobiliario. Consulta el librito de instrucciones para comprobar cuáles son las recomendaciones en cuanto a limpieza y sigue siempre el consejo de los expertos. 

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