Seguro que has pensado más de una vez de qué manera puedes reducir el desperdicio de alimentos. Nos pasa a todos cuando tiramos esa coliflor que se ha quedado seca en el fondo de la nevera o cuando nos toca desechar por completo esa bandeja de ternera que sus buenos euros te costó. Todos podemos tener un descuido. El problema está en cuando esos descuidos se van acumulando semana tras semana: lo que se pierde es mucha comida que podrías haber destinado a tu familia y, por supuesto, dinero.

Pero hay soluciones. Cosas que puedes hacer para mejorar tu estrategia a la hora optimizar el gasto en comestibles. Se trata de la lista de la compra inversa. Si no tienes la menor idea de a qué nos referimos, vamos a explicártelo, porque verás que es una táctica que puede ayudarte (y mucho) a ser más sostenible a la hora de comprar y consumir alimentos. Además, si quieres llevar esta estrategia a la práctica, también te daremos una serie de consejos prácticos para implementarla con éxito en tu rutina diaria.

¿Qué es la lista de la compra inversa?

La lista de la compra inversa es una manera un tanto distinta de abordar la compra de alimentos en el supermercado (el mercado, o la tienda de pueblo en la que vayas a abastecer tu despensa). En lugar de hacer una lista tradicional de productos que necesitas comprar, lo que harás será revisar lo que tienes en casa. Tanto en el frigorífico como en la despensa.

La idea es utilizar todo lo que está disponible antes de comprar más alimentos. ¿Qué conseguirás con esto? En primer lugar, reducir el desperdicio de aquellos alimentos que ya tienes. En segundo, ahorrarte un buen pico en compras del todo innecesarias. Veamos cómo empezar a hacer la lista de la compra inversa.

Paso a paso para empezar a utilizar la lista de la compra inversa

1. Haz un inventario de alimentos

• • Antes de ir de compras, haz un inventario (a través de una lista, en papel o en el móvil)de los alimentos que ya tienes en tu despensa, refrigerador y congelador
  • Anota las fechas de vencimiento para priorizar el consumo de los productos que están más cerca de su fecha de caducidad

2. Dedica tiempo a planificar los menús y comidas

• • Basándote en el inventario de alimentos disponibles, planifica las comidas para la semana
  • Diseña recetas en las que se empleen ingredientes que ya tienes para reducir la necesidad de comprar más

3. Haz listas de la compra mínimas

• • Después de planificar las comidas, crea una lista de compras mínima que solo incluya los ingredientes que realmente necesitas para completar las recetas que tienes que hacer

4. Evitar comprar por impulsos

1. • Los grandes despilfarros en la compra semanal se producen al comprar por impulsos. Si sigues al pie de la letra una lista de compras mínima, reducirás la posibilidad de comprar impulsivamente y, por tanto, a evitar productos que no son esenciales (muchas veces ultraprocesados), que terminan en la basura o que solo sirven para atiborrarte.
2. 5. Sé flexible a la hora de cocinar
   • Sé flexible con las recetas. Si no tienes un ingrediente específico, busca alternativas con los alimentos que ya tienes. Si quieres ahorrar, empieza por evitar un comportamiento demasiado gourmet.

¿Cuáles son las ventajas de hacer la lista de la compra inversa?

Puede que al principio hacer la lista de la compra inversa te resulte un poco incómodo, pero pronto verás que hacerlo de este modo tiene muchas ventajas. Aquí van las principales.

1. Reducirás el desperdicio de alimentos

• Al utilizar primero los alimentos que ya tienes, estarás reduciendo de manera significativa el riesgo de que los productos caduquen antes de ser consumidos.

2. El ahorro económico es fundamental

• Comprar solo lo necesario implica menor gasto y, por lo tanto, un ahorro económico directo y en el largo plazo.

3. Apuntando a la sostenibilidad ambiental

• Al reducir el desperdicio de alimentos, contribuyes a la sostenibilidad ambiental al disminuir la cantidad de alimentos que se descomponen en vertederos y generan gases de efecto invernadero.

4. Una planificación eficiente al cien por cien

• La lista de la compra inversa contribuye una planificación de comidas más eficiente, lo que puede ayudarte a ahorrar tiempo y energía en la preparación de alimentos del día a día.

5 trucos fáciles para usar la lista de la compra inversa

1. Comprueba a menudo qué tienes en el frigorífico y en la despensa

Se trata de hacer un inventario de los alimentos que tienes, pero de manera regular, para tener siempre actualizada la disponibilidad de productos en el hogar. Puedes tener una pizarra en la cocina que te ayude a ir tachando alimentos a medida que los consumes.

2. Prioriza los alimentos perecederos

Consume primero los alimentos perecederos para evitar que se echen a perder. Puedes situarlo en un punto estratégico del frigorífico, para así tenerlos a la vista y no olvidarte de ellos (que es lo que nos suele ocurrir).

3. Usa el congelador

Si te sobran productos frescos o cocinas algo que no vas a consumir enseguida, te recomendamos echar mano del congelador. Es el mejor recurso si lo que quieres es conservar bien los alimentos y tenerlos preparados para otro día. ¡Y eso que te ahorras de cocinar!

4. Anota fechas

Si vas a guardar productos, asegúrate siempre de añadirles una fecha, para que así sepas que debes consumir los más antiguos. Pon las fechas a la vista (a través de etiquetas) o usando rotuladores de colores.

5. Sé creativo en la cocina

Si vas a reaprovechar alimentos, tendrás que añadir a tus recetas altas dosis de creatividad. Puede que un día solo te queden dos tomates, una salchicha y un poco de queso. En ese caso, seguramente puedas echar mano de esos espaguetis que siempre tienes de fondo de armario para crear un delicioso plato de pasta o aprovechar esas berenjenas que han quedado en el fondo de la nevera para improvisar una lasaña la mar de nutritiva.

Como ves, la lista de la compra inversa es una manera súper valiosa de reducir el desperdicio de alimentos y de adoptar un enfoque más sostenible en tus hábitos de consumo diarios. Si consigues implementar la lista de la compra inversa en tu día a día, seguramente termines por adoptarla como manera de hacer en tu día a día, reduzcas de manera eficaz el gasto en tus compras y dejes de desperdiciar tantos alimentos. ¡Ánimo con ello!