Si tienes previsto comprar una vivienda tendrás que organizarte. En primer lugar, será necesario que te pongas en marcha para definir cuáles son tus necesidades y las de tu familia, si es el caso. Antes de comprar una vivienda debes hacer cosas como definir tu presupuesto, hacer un buen estudio de sus finanzas para saber si puedes comprar esa casa que tanto te gusta o si puedes permitirte una hipoteca.

También tienes que conocer el mercado de la vivienda, saber qué pasa ahora mismo con el euríbor, conocer el funcionamiento de una hipoteca y, por supuesto, tener bien preparada una batería de preguntas para cuando vayas a visitar cada vivienda. A continuación, vamos a proponerte en una lista cuáles son las 10 preguntas que debes hacer sí o sí al visitar un piso para comprar. ¡Vamos allá!

1. Por qué se vende el piso

Saber por qué se vende una vivienda es importante, porque te dará pistas sobre la urgencia del que vende. Es decir, si está vendiendo su casa porque tiene previsto desplazarse por trabajo a otra ciudad, tal vez le urja vender. En ese caso, seguramente resulte más fácil negociar una reducción en el precio. En cambio, si el comprador quiere vender un piso porque lo ha heredado, puede que le corra menos prisa y el margen de negociación se vería reducido.

2. Cuanto tiempo lleva a la venta

Puede que las viviendas que llevan mucho tiempo a la venta tengan algún problema importante. Por ejemplo, es posible que tenga vicios ocultos que exijan reformas o reparaciones importantes para ganar eficiencia y bienestar. También es posible que el vendedor haya puesto un precio demasiado elevado y esté arrastrando las consecuencias de esa mala decisión. Si hace mucho tiempo que la vivienda está a la venta, ganarás en tu margen de negociación.

3. Pregunta sobre la última reforma (o desperfectos que tiene) al visitar un piso

Otra de las preguntas clave tiene que ver con las últimas reformas que se han realizado en la vivienda. Si se han llevado a cabo reformas recientemente, el precio de la vivienda podría verse incrementado con razón. Por eso es importante que preguntes si el inmueble tiene algún desperfecto importante, como por ejemplo, que haya que reformar la cocina por completo, sustituir las tuberías del baño o reparar unas humedades. Si hay que hacer grandes obras, podrías intentar reducir el precio de venta.

4. Deudas pendientes (suministros, comunidad de vecinos, hipoteca…)

Es fundamental que tengas conocimiento de cuáles son las deudas pendientes. ¿Está la vivienda hipotecada? ¿No se han pagado los suministros en los últimos meses? ¿Existe alguna deuda con la comunidad de vecinos? ¿Se han pagado todas las cuotas del IBI? Todo esto tendrá que justificarse ante notario, porque delante del mismo, el vendedor tendrá que presentar el correspondiente certificado de que está al corriente de las deudas con la comunidad o si existiera algún tipo de carga sobre la vivienda. No hay que perder de vista que todas estas deudas tendrán que ser asumidas por el propietario tras hacerse efectiva la compraventa.

5. Visitar un piso: la relación con los vecinos y el barrio

Es una pregunta clave, porque la convivencia es muy importante para tener bienestar. Si hay problemas con un vecino ruidoso y conflictos varios, lo acusarás en el futuro. Y no es, en absoluto, agradable. Además de preguntar al propietario (que podría estar marchándose precisamente por problemas con el entorno), te recomendamos preguntar a otros vecinos. Seguramente ellos también podrán darte pistas sobre el estado de las cosas, la idoneidad del barrio y cualquier otra cuestión que sea de interés antes de comprar.

6. Coste medio de los recibos, IBI, cuota comunidad, etc.

Con saber el precio de la vivienda no basta. Debes saber el importe de las cuotas hipotecarias (aunque sea aproximado), pero también los gastos añadidos. Nos referimos, por ejemplo, al coste del Impuesto Sobre Bienes Inmuebles (IBI), la cuota de la comunidad y el coste medio de los recibos (agua, luz y gas). De este modo, podrás hacerte una idea de lo que vas a tener que pagar cada mes. Porque, por ejemplo, el importe del recibo del gas no es el mismo en una zona de interior que en una de costa.

7. Si hay derramas pendientes y de qué

Las derramas son muy comunes en las comunidades de vecinos. Hay que hacerlas puntualmente, por ejemplo, para reparar el ascensor, renovar la fachada del edificio o cambiar el motor del agua si se ha estropeado. En cuanto el piso se haya vendido, será el nuevo propietario el que tenga que asumir el coste de las derramas pendientes. Puede que sean poca cosa o que se traten de una cantidad considerable, por eso es imprescindible conocer si hay pagos pendientes y de qué proporciones para llegar a un acuerdo razonable.

8. Orientación y luminosidad al visitar un piso

Dependiendo del momento del día en que vayas a visitar la vivienda percibirás unas condiciones de luminosidad u otras. Lo ideal es visitar la vivienda a plena luz del día, pero no siempre es posible por cuestión de horarios. Si no puedes percibir la cantidad de luz que entra por las ventanas y tienes pocas pistas sobre la orientación, será imprescindible que preguntes. Una buena orientación puede ahorrarte un buen pico en calefacción o sumar bienestar a tu estilo de vida. 

9. Todos los documentos (ITE, IBI, IEE, planos de la casa…)

Es muy importante que los actuales propietarios tengan preparada toda la documentación necesaria para formalizar la compraventa. Esto incluye el ITE (Inspección Técnica de Edificios), el IBI (Impuesto sobre Bienes Inmuebles), el Informe de Evaluación del Edificio (IEE), los planos de la casa, el manual del edificio, etcétera. Pregunta al propietario si tiene localizada toda esta documentación para hacer las comprobaciones pertinentes. Si no los tiene, pídele que los reúna cuanto antes.

10. Cuándo se podría entrar a vivir

La última pregunta que te proponemos hacer puede ser relevante si tienes cierta urgencia para entrar. ¿Cuándo se podría entrar a vivir? Si el propietario todavía residen en la vivienda, puede que el plazo tenga que alargarse un poco. Esto te ayudará a planificar tus próximas gestiones: negociación con el banco, concesión de hipoteca, mudanza, etcétera.

Como ves, estas son diez preguntas básicas a la hora de visitar un piso, pero puede que necesites hacer más. Tenlas muy presentes y elabora tu propia lista. Es importante que aproveches el momento de la visita para resolver todas las dudas que tengas y así poder formalizar la operación de compraventa con total conocimiento de causa.