No serán muchas las ocasiones en la vida que vamos a tomar la decisión de hipotecarnos. De hecho, no es muy común comprar más de una o dos viviendas en toda la vida, a no ser que tengamos interés y dinero para hacer muchas inversiones. Comprar una vivienda es una inversión de alto coste, que suele generarnos muchas dudas, especialmente si vamos a sufragar la compra con la contratación de un préstamo hipotecario.
¿Qué es fundamental en estos casos? Pues en primer lugar, estar muy informado. Antes de que la balanza se decante hacia un banco, una oferta o un tipo de producto determinado hay que conocer el escenario y la naturaleza de la hipoteca al detalle. En términos generales, este será un gasto que tendremos que asumir durante muchos años de nuestra vida (entre diez y treinta, habitualmente), de modo que estudiar bien la operación no solo es una recomendación, sino un gesto obligado.
Las 10 claves para solicitar una hipoteca
Antes de solicitar la hipoteca, hay que tener en cuenta algunas claves. En habitaclia te recomendamos tener en cuenta lo siguiente:
1. Haz los cálculos para solicitar la hipoteca según tus ingresos
¿Sabes qué tipo de hipoteca te puedes permitir? Como te decíamos, los préstamos hipotecarios suelen ser de larga duración, de modo que es fundamental ajustar la hipoteca a la situación económica y profesional del hipotecado. No es conveniente que la hipoteca te mantenga ahogado durante mucho tiempo y se lleve parte de tu salario. Según recomendaciones del Banco de España, lo ideal es no endeudarse más de un 30 % del salario. Esto significa que con una nómina de 1.800 euros mensuales netos, la cuota de la hipoteca no debería estar por encima de los 540 euros.
2. Elige entre hipoteca fija o hipoteca variable
La realidad del mercado hipotecario de hace unos meses poco o nada tiene que ver con la realidad a la que los hipotecados tienen que enfrentarse ahora. Con las consecutivas subidas de tipos del BCE para controlar la inflación, el euríbor se ha incrementado considerablemente después de más de seis años en tasas negativas. Ahora mismo el índice de las hipotecas variables ha subido, aunque tras varios meses, lo más lógico es que la senda sea de ahora en adelante para la estabilización.
Pero ojo, que las hipotecas fijas también se han incrementado, pasando de un 1 % al 3 % actual. Ahora mismo donde hay más ofertas es en el ámbito de las hipotecas variables, con ofertas que presentan diferenciales en torno al 0,25 %. También hay que explorar las hipotecas variables, puesto que también hay muchos bancos que han lanzado ofertas y es aquí donde se pueden encontrar las mejores ofertas.
3. Conoce el vocabulario básico para las hipotecas
No todos tenemos porqué estar familiarizados con los términos hipotecarios, así que antes de avanzar en la contratación, conviene tener bien presente el significado de los siguientes conceptos:
- Capital del préstamo: la cantidad que te presta la entidad bancaria.
- Comisión: la cantidad que puede cobrarte la entidad bancaria por la apertura del crédito, por la subrogación, por el estudio, por la cancelación o reembolso anticipado, por reclamación de posiciones deudoras.
- Cuota hipotecaria: la cantidad que pagarás mes a mes por el préstamo.
- Diferencial: el porcentaje fijo que se añade al índice de referencia (normalmente el euríbor) a un préstamo variable.
- Escritura de compraventa o de préstamo hipotecario: el documento que se hace constar ante notario por la compraventa o por la apertura de la hipoteca.
- Euríbor: es el índice de referencia que representa el tipo de interés de la mayor parte de entidades
- FIPER: es la ficha de información personalizada sobre las condiciones financieras del préstamo
- FIPRE: aquí se incluye la información precontractual para que el usuario pueda comparar ofertas
- Plazo de amortización: tiempo que tendrá el prestatario para devolver el dinero
- TAE: es la Tasa Anual Equivalente, o lo que es lo mismo, el porcentaje del coste anual del préstamo teniendo en cuenta todos los gastos
- TIN: es el Tipo de Interés Nominal o el coste que tiene que una entidad financiera preste dinero a alguien
- Tipo de interés: el porcentaje que se cobra por el hecho de que la entidad preste dinero
4. Compara ofertas de hipotecas en, al menos, 3 bancos
No te lances con el primer banco que te haga una propuesta. Lo ideal, antes de contratar un préstamo, es tener ofertas de al menos tres bancos distintos. Ahora que ya conoces buena parte de los conceptos que son necesarios para firmar una hipoteca, ya sabes que el FIPRE te servirá para comprar ofertas con varias entidades. De este modo te resultará más fácil reconocer qué préstamo hipotecario es más ventajoso.
5. Negocia con varias entidades las condiciones de la hipoteca
Te hemos indicado lo importante que es tener sobre la mesa ofertas distintas de, por lo menos, tres bancos y luego es fundamental ser diestros en la negociación. Para ello hay que conocer bien el contexto económico actual, o por lo menos estar informados, con el objetivo de no caer en ningún error o trampa. Si tienes dudas, ante todo, pregunta y déjate asesorar por un experto en la materia que pueda ayudarte, como por ejemplo, un asesor fiscal o económico.
6. Pregunta todo lo que no entiendas del contrato de la hipoteca
Es muy normal que cuando te enfrentes al mundo hipotecario te surjan infinidad de dudas. No pasa nada, no te preocupes por ello. Todo lo que tienes que hacer es informarte y, como no podía ser de otra forma, preguntar todo aquello que no entiendas.
Las entidades bancarias deben explicarte el funcionamiento del producto y, además, es obligatorio acudir por lo menos una vez al notario para leer la escritura de manera conjunta y hacer las peticiones de información que sean necesarias. El objetivo de todo esto es que vayas a la firma sabiendo exactamente el tipo de producto que vas a contratar, teniendo en cuenta que se trata de una operación de alta complejidad.
7. Revisa los productos vinculados y entiende qué te ofrecen
Cuando te dispongas a contratar la hipoteca, descubrirás todo un universo: el de los productos vinculados. No es obligado contratarlos, pero es muy común que las entidades bancarias ofrezcan unas condiciones más ventajosas para aquellos hipotecados que decidan adquirir algunos productos, como por ejemplo una cuenta bancaria con nómina domiciliada, seguros de vida u hogar, planes de pensiones, etcétera.
Antes de firmar nada hay que hacer los cálculos necesarios para comprobar si compensa pagar un seguro de vida, por ejemplo, en lugar de pagar una cuota más alta para la hipoteca. A partir de ahí te resultará más fácil decidir.
8. Investiga si hay ayudas y subvenciones para comprar vivienda
Comprar vivienda en los tiempos que corren no es fácil. Hay colectivos vulnerables, especialmente los más jóvenes, que tienen serias dificultades para adquirir vivienda. Si a esto le sumamos el problema del alza de precios en ciudades tensionadas, la cosa se complica. Por suerte, en algunas comunidades existen ayudas y subvenciones para adquirir vivienda, con las que puede resultar mucho más ventajoso adquirir un préstamo.
9. Valora si te conviene contratar un broker hipotecario
Como ves, contratar una hipoteca no es coser y cantar, en ningún caso. Exige contar con ciertos conocimientos (o adquirirlos de nuevo), además de tener información exhaustiva sobre el contexto económico actual. Si no tienes tiempo o crees que te sientes más tranquilo contando con la ayuda de un experto, puedes considerar la contratación de un broker hipotecario.
Estos profesionales se dedican a negociar hipotecas para conseguir las mejores condiciones según el perfil del cliente. Será tu guía durante todo el proceso y te ofrecerá un servicio completamente personalizado. Eso sí, tendrás que asumir el coste de sus servicios. No obstante, si consigue una hipoteca ventajosa, la inversión habrá merecido la pena.
10. Lee el contrato de la hipoteca y confirma que las condiciones habladas son las que aparecen
Si has contratado a un bróker hipotecario quizá te sientas más seguro, pero tanto si lo haces como si no, tu obligación será leer atentamente el contrato hipotecario para confirmar que finalmente se han añadido las condiciones negociadas con la entidad.
Este paso forma parte del proceso de verificación, paso a paso, de la contratación de un préstamo hipotecario. No olvides volver a preguntar si tienes dudas o consideras que alguna de las cláusulas no se corresponde con lo hablado.